5 ejemplos de casas flexibles para tiempos de pandemia.

Las nuevas casas cambiantes

Si nuestra interacción social actual está marcada por el trío mascarilla-manos-distancia, en la conceptualización del nuevo hogar reinan otros tres principios: ventilación, espacios intermedios (balcón, patio, terraza) y flexibilidad. A partir de ahora, estos serán los tres mandamientos tanto en la obra nueva, como en la reforma.

La necesidad de espacios cambiantes, que se adapten a las exigencias de cada momento dentro del hogar es hoy una tendencia consolidada en un mundo que ha virado hacia el tele-trabajo y el aumento de tiempo dentro del hogar. En esta línea, hemos elegido 5 proyectos de casas flexibles que, seguro, inspirarán a muchos propietarios y arquitectos.

Proyecto My Family and Other Animals, de Ignacio G. Galán [igg – office for architecture] y TallerDE2 Architects

Las viejas construcciones de Lavapiés esconden interiores tan sorprendentes como éste. Ignacio G. Galán, Arantza Ozaeta y Álvaro Martín Fidalgo son los autores de esta singular reinvención de lo cotidiano. Grandes puertas abatibles traslúcidas permiten separar o unir el salón del estudio, y este último del dormitorio. Así, la configuración varía para dar respuesta a cada momento.

Proyecto Homeping, de Gyra Architects

Rompiendo con ideas preconcebidas, y con el objetivo de aprovechar cada rincón de la casa, el estudio Gyra Architects basó su proyecto en la transformación de un único espacio según el momento día vs. noche y verano vs. invierno. El elemento protagonista es una estructura de madera, que se extiende de lado a lado del interior. Su función es doble: conectar visualmente toda la planta de la vivienda y servir como almacenamiento de diferentes estancias tales como el comedor, la cocina, el vestidor y una pequeña zona de trabajo.  

Proyecto casa-estudio en Torrent, de Teresa Carrau Carbonell y Eduard Baviera Llópez

Una vivienda flexible que se acopla a una vida en constante evolución. El proyecto de Carrau Carbonell concentra baño y cocina en un núcleo central. El resto del volumen queda libre, con una pared móvil y desplegable que sale del corazón y permite dividir el espacio en estancias o dejarlo libre.

Proyecto Una habitación mirando al mar, de Primitivo González

Estudio Gonzalez Arquitectos multiplica los 50 m2 de este apartamento en la Costa del Sol a través de un sencillo planteamiento de divisiones flexibles. El secreto: proyectar un marco y un carril de cortina que recorre el espacio y configura distintos ambientes. Así, obtiene una distribución diferente, polivalente y flexible.

Proyecto Casas Z42, de Garmendia Cordero Arquitectos

Explican los arquitectos que, aunque los inicios del proyecto son anteriores a la pandemia, el confinamiento y sus efectos sobre la vida doméstica generó un interesante debate sobre la organización del espacio, los usos y la flexibilidad de los ambientes. Esto ha tenido una clara repercusión a la hora de llevarlo a cabo. Finalmente, Garmendia Cordero crearon un gran mueble-contenedor de madera para centralizar los usos más difíciles de modificar (cocina y baño). El resto de las habitaciones de la casa son totalmente intercambiables.