Trend alert! Las molduras están de moda (y estos proyectos lo corroboran).

El sello de una casa palacio

¿Cómo convertir un apartamento en una casa palacio? Exactamente: con el uso de molduras. Teresa Carrau Carbonell firma la reforma de este impresionante piso de 150 m2 en el centro de Valencia. Respetando la arquitectura e historia del lugar, se han mantenido los techos altos y las molduras originales que le proporcionan esos aires señoriales a la vivienda.

Un ático de arquitectura escultural

Ubicado en la parte alta de Barcelona, este impresionante ático es toda una oda al estilo clásico. El estudio de Isabel López Vilalta no solo ha respetado las cornisas, molduras y rosetones que visten sus paredes, sino que ha centrado la rehabilitación en su recuperación. Además, los armarios han sido diseñados con tableros texturizados que imitan la misma técnica.

Un Portugal muy señorial

El arquitecto Pedro Daniel Santos firma esta respetuosa rehabilitación de un edificio de dos siglos de antigüedad. Las formas geométricas de su arquitectura exterior no tienen nada que envidiarle al clásico espacio interior. Recuperando las clásicas técnicas constructivas originales, la primera planta le da protagonismo al trabajo de escayola y las molduras de sus techos.

Artesanía modernista

Volvemos a Valencia para visitar este apartamento modernista en una zona residencial del Ensanche. En este caso, Moiz ha sido el encargado de realizar la rehabilitación de esta vivienda del siglo XX en la que han conseguido mantener todo el encanto preexistente. Esculturales molduras, enormes ventanales y un pavimento de mosaico de Nolla son los grandes protagonistas de este proyecto.

Elementos clásicos x Estilo Memphis

Una prueba de que las molduras no solo pueden existir en ambientes clásicos es este piso tan moderno en San Sebastián. El interiorista Mikel Irastorza firma la reforma que le ha dado un toque ecléctico a este proyecto (con guiños al estilo ochentero Memphis) sin olvidar su arquitectura original. Así pues, se han enmarcado algunos techos con molduras de escayola para hacer referencia a la historia del lugar.

Palabra de interiorista

Si una interiorista incorpora molduras en la reforma de su nuevo estudio, podemos afirmar que son tendencia. Es el caso de Pilar Líbano y su nueva oficina en Barcelona, ubicada en un edificio que data de 1870. Recientemente reformada, esta antigua vivienda rinde homenaje a su pasado arquitectónico manteniendo los suelos hidráulicos y las molduras originales. El resultado es un toque clásico en un estudio muy actual.

Interiorismo de contrastes

En el barrio de Ruzafa, en Valencia, nos encontramos con otra vivienda que mantiene tanto sus molduras originales como el pavimento Nolla. Como resultado, los elementos que se mantienen crean un interesante contraste con la contemporaneidad del resto del apartamento. Esta reforma la firma el equipo de Destudio.

Diálogo entre pasado y presente

Al afrontar la reforma de esta vivienda modernista en Barcelona, la arquitecta Clara Ocaña se propuso intentar mantener todo lo que fuera posible. Por ese motivo, conservó los suelos hidráulicos (que tuvieron que ser recolocados y completados), las vigas de madera, el ladrillo visto del techo y las molduras originales.

Conservar y redistribuir espacios

El estudio DG Arquitecto Valencia es especialista en este tipo de proyectos: se encargan de realizar pequeñas modificaciones en la distribución de viviendas para adecuarlas a la vida de hoy. Esa fue la premisa con la que afrontaron la rehabilitación de este ático en Ruzafa, y, por ello, que se mantuvieron tanto el suelo como el techo de la vivienda original.

Analizando cada rincón

El objetivo de las arquitectas de Bodegón Cabinet era que sus clientes pudieran habitar la casa en su forma original, pero adaptándola a las necesidades de las nuevas generaciones. En consecuencia, se han añadido elementos como muebles a medida y nuevas encimeras de terrazo (aunque con aires muy retro), pero se han conservado los suelos hidráulicos, las elegantes molduras y los arcos originales.

Un gimnasio de estética clásica

Inertial, un gimnasio de estética griega situado en el Ensanche valenciano, es la prueba de que no todos los centros de entrenamiento son iguales. Haciendo referencia a la antigua Grecia, el lugar contiene elementos decorativos claramente clásicos: molduras, bustos, columnas y el uso del mármol como uno de los materiales principales evocan lo escultural de la época.

Consulta todos los proyectos con molduras publicados en Diariodesign en este enlace.