¿Se ha pasado de moda lo hipster?
Tras la fiebre vivida en los dos últimos años, el estilo más vinculado con los millennials se está desinflando. Hacemos un repaso con los diseños más hipster para valorar su atemporalidad.
La subcultura contemporánea hipster se vincula con una juventud bohemia y urbana, con gusto por lo alternativo e interés por lo vintage. Recogemos en nuestro Top-10 diferentes espacios que recomendaría cualquier joven interesado por salir de los cauces habituales y lo más mainstream. No te los pierdas.
Un hotel hipster en Estocolmo
El interés por lo nórdico es parte fundamental de la estética de los hipsters. Ciudades como Copenhague, Reikiavik o por supuesto la capital sueca desprenden un aire de lo más atractivo. Así que un viaje allí siempre es buena idea.
Con establecimientos como Downtown Camper, con un diseño completamente a la medida que se ha adaptado a las nuevas tendencias del co-living.
Oficinas chic en San Francisco
El distrito Dogpatch de la ciudad californiana vive un resurgimiento. Un antiguo barrio industrial, hoy convertido en zona residencial en auge en el que se practican nuevas formas de convivencia.
Abaca es un espacio tech-friendly y urbano que homenajea la historia náutica de la zona buscando la conexión directa con la comunidad.
Las zapas más hipster: Pompeii
Si sales en una canción de Carolina Durante, es que realmente estás en todas partes. Así son las zapatillas Pompeii. Calzado oficial de modernos, se caracterizan por el colorido de sus suelas de goma.
Y por su sede en la calle Fuencarral. Un caleidoscopio de formas puntiagudas que fascina a pesar de su pequeño tamaño.
Qué sería de nosotros sin un buen brunch
Con el movimiento hipster hemos aprendido también a comer de manera más sostenible y saludable. Y cómo el común almuerzo puede tener un punto extra de modernidad.
Viajamos a Copenhague para redescubrir el porridge. Deliciosamente visual.
Contar la vida en fotos
No se puede obviar el papel de las redes sociales en el advenimiento del estilo urbano actual. A pesar de ser un movimiento «alejado de las tendencias» como base, mostrar el estilo en Instagram es condición indispensable para etiquetarse como hipster.
Un ejemplo perfecto de esta conjunción es AStudio. Un estudio de fotografía de estilo rústico rústico industrial en Pekín.
La barba como seña de identidad
Y es que no hay hipster que se precie que no mantenga una cuidad barba. Para eso, lo mejor son los productos cosméticos de Santa Barba.
Höfats: no se puede ser más molón
Pero no sólo con estética se describe el estilo hipster. Es un modo de vida en el que la naturaleza también cobra importancia, a pesar de su marcado origen urbanita. Y para ello, la marca perfecta es Höfats.
Una serie de complementos que consiguen hacer del ritual de cocinar al aire libre todo un arte. Y un placer.
Clientes millennials, trabajadores millennials
Cambian las personas, cambian las maneras de trabajar. Y lo ejemplifican en gran medida los coworkings y oficinas flexibles que ahora marcan la tendencia de los espacios de trabajo.
Un ejemplo es la sorprendente red de pescar que funciona como espacio de relax en las oficinas de Uniplaces en Lisboa.
Compras en Brooklyn: modernez made in Etsy
La Gran Manzana respira modernez y estilo hipster, y es lo que le faltaba a las calles en las que podemos encontrar tiendas, estudios y galerías de arte y diseño que protagonizan los sueños de cualquier espíritu libre y transgresor.
No es raro que allí se haya instalado el más grande mercado online de artículos hechos a mano, vintage y únicos: Etsy.
Un cóctel… ¡salud y larga vida a lo hipster!
Ubicada en el barrio de Sant Antoni, lo más hipster en Barcelona, Bitter es una coctelería en la que Miriam Barrio ha jugado con la decoración vintage, elementos industriales, madera, una vegetación muy presente y un contraste de luces y sombras para conseguir un ambiente muy cálido.
Puede que el término esté denostado, pero nosotros pensamos que lo hipster sigue de moda. Un estilo que ha marcado tendencia, y lo seguirá haciendo. Vosotros, ¿cómo lo veis?