Una rehabilitación en Tarragona que dialoga con el pasado.
El estudio de arquitectura NUA lleva a cabo la rehabilitación de un antiguo edificio situado en el casco antiguo de Tarragona. Un diálogo a través del tiempo que toma como referencia la ciudad romana para añadir un nuevo estrato a la memoria.
Convivir con los restos de una ciudad romana
El casco antiguo de Tarragona se encuentra situado en un punto entre la nostalgia y el abandono. Un escenario delicado en el que la regeneración es una necesidad para devolver la plenitud a las sucesivas transformaciones medievales, renacentistas y modernas que conviven con los restos de una ciudad romana.
Los centros urbanos de las ciudades históricas son espacios ricos y complejos; espacios multitemporales que dialogan a través del tiempo. Por ello, la rehabilitación de NUA Arquitectures sigue un camino que dialoga y reutiliza lo preexistente para añadir un nuevo estrato a la memoria.
Tres viviendas en una
La rehabilitación de Mediona 13, una de las numerosas viviendas deshabitadas del centro histórico de Tarragona, se ha ejecutado buscando un uso flexible de los espacios. Con 300 m2 distribuidos en planta baja, tres plantas y un altillo, está pensada para ser tres viviendas en una. Cada planta funciona de manera independiente y dispone de espacios para cocinar, comer, asearse y descansar.
A su vez, cuenta con accesos y zonas colectivas conectadas con las viviendas por aperturas interiores que permiten la permeabilidad entre el espacio común y el íntimo. Gracias a este juego la edificación puede acoger a una gran familia o a tres pequeñas.
La búsqueda de la iluminación y ventilación natural
Ubicado en una callejuela estrecha y oscura, sobre los restos de lo que un día fue la antigua plaza romana del Fórum Provincial, el edificio está formado por tres medianeras y una fachada principal. Por ello, otro de los objetivos era hacer llegar la luz y la ventilación natural a todos los espacios interiores.
Para mejorar la iluminación natural se colocó una puerta transparente de acceso al edificio, que permite que la luz penetre hasta la plaza interior. Esta plaza recibe a los habitantes y da comienzo a la escalera, por donde la luz asciende y se filtra en las viviendas gracias a la sucesión de ventanas interiores. Ventanas que a su vez proporcionan nuevas relaciones visuales entre los espacios comunes y las viviendas.
Se amplía también el patio trasero existente, al que se abren nuevas ventanas y puertas balconeras que permiten además de la entrada de luz, la ventilación cruzada de todas las viviendas.
Recuperar los elementos originales
Se refuerza por completo la estructura y la escalera existentes, conservando los elementos en buen estado. Los muros de medianera se tratan y, en las zonas que es necesario, se desnudan para ser reparados y consolidados. Tras estos muros se descubren colores que son utilizados en los nuevos elementos estructurales de cada planta, creando un diálogo entre lo antiguo y lo nuevo.
La rehabilitación de NUA preserva la esencia, la memoria y el espíritu de la construcción existente, adaptándola a las necesidades de una vivienda contemporánea.
Fotografía: José Hevia