Una casa escondida en otra.
Construir una casa dentro de otra es al reto al que desde Zooco Estudio se han enfrentado en este proyecto. Un loft diáfano de finales del siglo XX en el centro de Madrid, que los arquitectos han transformado en una original vivienda.
«A pesar de tratarse de una reforma interior, el proyecto se parece más al de construcción de una vivienda unifamiliar», cuentan los arquitectos.
Sobre un telón de fondo de muros de carga, estructura de pilares de madera y forjado de bóveda catalana, la intervención añade su propia estructura, cerramientos e instalaciones.
El concepto del proyecto es la creación de forjados a diferentes alturas que acogen el programa en su parte inferior y superior. Una estructura, a veces apoyada en el suelo y otras colgada del techo, que sujeta los forjados. Para reducir su espesor al mínimo, se opta por perfiles metálicos de 8x8cm, lacados en blanco y con todas las instalaciones ocultas en su interior.
La planta baja de la estructura alberga un dormitorio con baño privado, el baño principal, y una zona semi-abierta y versátil que puede convertirse en otra habitación. En la parte superior se sitúan otro dormitorio, y una zona de chill / estudio conectado mediante un pasillo que hace las veces de galería y librería.
Situado fuera de la estructura y conectado con el baño principal, el dormitorio principal puede aislarse por completo del resto de estancias gracias a una puerta corredera de suelo a techo.
Junto a la zona de office y el baño común, la cocina se comunica con la zona de comedor, y el salón.
Inspiración japonesa
«Nuestra principal fuente de inspiración en este proyecto ha sido arquitectónica», cuentan desde Zooco Estudio, muy influidos en su trabajo por la cultura japonesa.
La intervención se estructura a partir de cinco elementos principales de materiales muy distintos: ladrillo, madera, metal, vidrio y microcemento. En forma de muro perimetral de carga, el ladrillo visto re recubre con una característica pintura plástica blanca; el mismo color de la estructura metálica lacada en blanco.
La madera de pino existente, que da forma a gran parte de los solados de la vivienda y algunos cerramientos de la nueva estructura; convive con el microcemento. Presente en superficies húmedas como el solado de la cocina y los baños, los lavabos y la bañera de obra, genera superficies continuas y sin juntas. Por último, las superficies de vidrio transparente y vidrio al ácido potencian la transparencia y luminosidad del espacio.
Fotografía: Imagen Subliminal