Las evocadoras colecciones de Fluvia, en Light+Building.
Tres son las novedades de Fluvia para este 2018. Nuevas propuestas que se integran perfectamente en cualquier entorno arquitectónico. Y que buscan ceder todo el protagonismo a la luz, para despertar emociones en el usuario.
El stand: diseño de Estudi Antoni Arola
Partiendo del showroom de Fluvia en Barcelona, Antoni Arola y su equipo firman este stand bajo un concepto «totalmente arquitectural», explican.
Jugando con distintos volúmenes y alturas, cada producto se muestra en diferentes áreas para poder disfrutarlo y entenderlo en su contexto, bien en techos o en paredes.
Además, la zona LAB Experiences permite descubrir la experimentación creativa. Que este año se ha centrado en los tonos flúor. Pura tendencia.
Es habitual decir que comemos por los ojos. Y la luz es fundamental para contribuir en ello. Y para mostrarlo, la marca ha invitado a Vega Hernando. Quizá sea más conocida por su trabajo: Eating Patterns es una interpretación visual y gastronómica de las colecciones y novedades que se presentan en la feria. Además, comparte lenguaje con la identidad gráfica de los nuevos catálogos.
Mood, una nueva dimensión arquitectónica
El diseñador industrial e interiorista Ricard Vila es el autor de Mood. Un diseño que convierte los planos verticales y horizontales en elementos. Se integra así la fuente de luz en la pared, como si formase parte de ella.
Mood permite múltiples combinaciones para crear composiciones decorativas. También distintos efectos de luz sobre la superficie. Personaliza así los ambientes, influyendo positivamente sobre el estado de ánimo. Infinitas posibilidades de «transformar en luz la pared o el techo».
Los acabados superficiales se presentan en cromado, dorado o cobre. Fluvia LAB Experiencies ofrece además la posibilidad de colorear Mood en tonos flúor, amarillo, rosa, naranja o azul, permitiendo adaptar la luminaria al contexto que se desee.
Hole: luz invisible
Hole es parte inseparable de la estancia en que se sitúa. En concreto, de su techo. Un cilindro puro de luz, que se genera como si viniera del exterior: una claraboya o un ojo de pez que ilumina.
Protagonismo absoluto, por tanto, a la luz en esta fascinante novedad de Fluvia. En ella, lo más importante es la tecnología invisible que la sustenta.
Entre sus múltiples posibilidades destacamos la capacidad de ajustar el ángulo de visión directa. También, su personalización: temperatura de color cálida o fría, sistemas de regulación y control y una variada gama de tamaños y acabados decorativos.
Aplicando además el ConceptFlúor se produce un efecto singular. El interior del cilindro cambia al llamativo color mientras que el haz de luz se mantiene blanco.
Drop, última de las novedades de Fluvia 2018
La última de las novedades de Fluvia en Light+Building es Drop. Un sistema configurable, en el que proyectores y elementos estructurales se combinan para crear luminarias que posibilitan llevar la luz donde es más necesaria.
Drop es por tanto un elemento constructivo que ilumina. Se puede aplicar en pared, techo y también en un carril.
Su nombre es evocador: una gota que se integra en cualquier estructura, ofreciendo una luz puntual y flexible.
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