Sinuosidad y cromatismo en el Hotel Barceló Málaga.
Ilmiodesign ha rediseñado la planta baja del Hotel Barceló Málaga, ocupado por una recepción, un lobby y el bar-restaurante. Con el fin de humanizar el espacio, el estudio de interiorismo ha construido un espacio habitable, cálido y acogedor, donde conviven elementos curvos y fuertes colores. Como sello de identidad, destacan las piezas de mobiliario y lámparas creadas ad-hoc para Barceló.
Situado junto a la estación de tren María Zambrano, el hotel Barceló Málaga es conocido por divertidas propuestas indoor, como el tobogán para adultos que conecta las salas de reuniones de la primera planta con la baja.
Espacios habitables para vivir experiencias
Dinámico y confortable, el nuevo espacio elimina todas las barreras arquitectónicas existentes, como los suelos desnivelados y escalonados, y unifica cotas. Para lograrlo, Ilmiodesign ha diseñado atractivos elementos que aportan movimiento y versatilidad.
Para hacer más llamativo el acceso desde la estación María Zambrano, los diseñadores han creado una sucesión de arcos en tonalidades turquesa. Envuelven al usuario como una escenografía, guiándolo hasta el interior del hotel.
Ya dentro, cálidas lamas doradas definen la zona del bar, presidido por una barra y un botellero, ambos diseño de Ilmiodesign.
El bar-restaurante está presidido por una gran mesa central de 1 metro de altura, coronada por una lámpara que potencia el eje vertical. Bancadas curvas y sinuosas en torno a ella dinamizan el espacio y ofrecen un acogedor asiento a los clientes.
La «lengua» de gresite rosa que envuelve el restaurante es uno de los elementos preexistentes que los diseñadores han decidido conservar y potenciar. Integrado en el nuevo proyecto de interiorismo, aporta mucha fuerza, luz y movimiento a la sala.
Sinuosidad, cromatismo y un mobiliario único
Para lograr un clima cálido y acogedor, Spada y Corbari han apostado por líneas sinuosas, un fuerte cromatismo y una cuidada selección de piezas de mobiliario. Formas curvas definen tanto las bancadas y piezas de mobiliario, como la lengua de gresite rosa y los elementos que conforman las lámparas.
El espacio se viste con una armónica combinación de colores, que incluye distintas tonalidades de rosa, turquesa y beige. Presente en la columna central, los pies de mesa, los platos de las lámparas, las lamas del bar, la trasera de la barra y la cava, el dorado genera una sensación de confort y relax. El juego de luces ámbar, casi dorada, y el suelo de PCV imitación madera añaden confort y calidez.
Creado ad-hoc, el mobiliario reafirma el carácter del espacio, dotándolo de personalidad. «Para nosotros es fundamental crear piezas con personalidad propia, pensadas exclusivamente para el concepto creativo del proyecto», señalan Spada y Corbari. El estudio ha diseñado parte del mobiliario interior –mesas y bancadas–, exterior –asientos y mesas–, y gran parte de las piezas de iluminación. Para el resto, han contado con la colaboración de marcas como Viabizzuno o Marset.
Fotografía: Eduardo Conde
Hotel Barceló Málaga
Calle Héroe de Sostoa, 2
29002 Málaga