Blushing Bar, una barra de bar ruborizada.
Los arquitectos Chan+Earys y el fabricante Sebastian Cox crean “Blushing Bar”, una barra de bar elaborada de madera de roble rojo que explora el material y reta la creatividad de los artistas.
Presentada en la exposición “Handmade” de la revista Wallpaper celebrada en la Semana del Diseño de Milán, Blushing Bar fue creada con motivo del décimo aniversario de la muestra de la revista en la ciudad italiana.
Forma circular y color rojo
La barra se compone de 10 módulos para preparar cócteles, todos conectados formando una barra circular. Está hecha de roble rojo estadounidense, en colaboración con la American Hardwood Export Council (AHEC).
Una de las cosas que más llama la atención es su forma circular. “Las barras de bar suelen actuar como barrera”, nos explica Merlin Earys, uno de los arquitectos del proyecto. “Al hacerla circular, se convierte en un lugar más interactivo y atractivo”.
La barra combina cualidades funcionales a la vez que propiedades de la madera meramente decorativas. Una madera, la del roble rojo, que tiene una tonalidad similar a la de la piel rosada y que simboliza las venas por las que circula la sangre cuando uno está ruborizado.
Experimentación previa
Al color rojo final no se llegó de un día para otro. Sebastian Cox quiso realzar el color del roble, por lo que empezó a experimentar bombeando tinta caligráfica roja en los orificios de la madera. A continuación, introdujo aire a presión, vaciándose la tinta en los oficios perforados en cuestión de segundos. La última fase consistió en aplicar a la madera una mezcla de aceite de pigmentación, para que se pudiesen distinguir las zonas entintadas de las naturales. El roble rojo se hizo incluso más rojo.
La interacción entre tecnología y trabajo artesanal ha sido una de las claves del proyecto. Usan la maquinaria para trabajar la madera, pero siempre se trabaja de manera manual para el acabado.
«Blushing Bar» no se ha diseñado como una pieza única, sino que se espera que el proceso de entintado pueda llegar a tener una aplicación comercial. Ya veremos como acaba, pero esta claro que la madera tiene aplicaciones que van mucho más allá de la ebanistería.
