20.000 azulejos dan forma a esta utópica tienda en Nápoles.
El arquitecto italiano Carmine Abate ha rediseñado Blessing, una tienda de moda en Castellammare di Stabia en Nápoles con una impactante estética. Espejos, neones, iconos del diseño y más de 20.000 azulejos crean un efecto óptico absorbente.
Un gran búnker de moda formado por azulejos
La tienda Blessing de Castellammare di Stabia es un auténtico culto al arte y el diseño. El arquitecto Carmine Abate ha proyectado un espacio de 170 m2 que se presenta como un gran búnker de la moda.
Para ello, han sido necesarios más de 20.000 azulejos. En formato 10 x 10 y de color blanco hielo, estos se extienden a lo largo de la tienda sobre las paredes, el suelo y el techo. De esta forma, se potencia el efecto de caja inmersiva y sirven como lienzo perfecto para añadir nuevas y vibrantes tonalidades y texturas. Su junta de 5 mm ayuda a generar esa sensación cuadrada en el visitante.
Efecto ‘mise-en-abysme’
Carmine Abate ha materializado el concepto de ‘mise-en-abysme’. Una expresión francesa que habla de una profundidad imponente e inmensa. Así nació el escenario utópico que propone Blessing.
Los espejos que visten la zona de los probadores crean un efecto casi laberíntico y maximizan el espacio. Su entrada está coronada con un neón rojo que grita ‘Forever more’, un homenaje a la diva irlandesa Rósín Murphy. Como ella, Blessing es atractiva y sofisticada, pero también atrevida e irreverente.
El más es más italiano
A los neones, azulejos y espejos se le suman numerosos detalles decorativos que convierten a Blessing en toda una explosión de materialidades, texturas y color.
Los azulejos en blanco hielo sirven para potenciar las nuevas tonalidades como el color mostaza que enmarca la entrada a la tienda, el rojo Cartier de las estanterías y el azul imperial de las largas cortinas de los probadores.
El mostrador se presenta como como una caja de madera de nogal que parece totalmente suspendida en el aire gracias a su zócalo reflectante. Además, en el centro del espacio se ubica un puf en color verde que acapara todas las miradas.
Los expositores de accesorios están hechos de acero, terciopelo y madera; y los de calzado de troncos de madera sobre una base dorada. Este toque sofisticado lo refuerzan los iconos del diseño que completan el interiorismo de la tienda. La mesa de centro de Poliform, la silla Superleggera de Gio Ponti para Cassina o la lámpara de pie Chiara que diseñó Mario Bellini para Flos.
Así pues, una vez más, vuelve a quedar demostrado que el más es más italiano sigue siendo todo un acierto.
Fotografía: Carlos Oriente
Blessing. Via Don Minzoni 187, Castellammare di Stabia (Nápoles)