Estudio Forma diseña una baldosa hidráulica a medida para este piso modernista de Barcelona.
Con el fin de revivir el modernismo en este céntrico piso de Barcelona, el estudio Forma diseña un nuevo pavimento de baldosa hidráulica verde vivo. El blanco de paredes y techos refleja la luz que inunda el interior y hace destacar el suelo.
Aprovechar el máximo modificando lo mínimo
De planta alargada y rectangular, la vivienda cuenta con dos fachadas: una a la calle Enric Granados y otra a un gran patio de manzana. Para aprovechar al máximo la luz natural que entra por ambos lados, se han unificado las estancias que dan al exterior derribando el tabique que las separaba. En una, encontramos la cocina de líneas muy minimalistas y materiales contemporáneos que mantienen la esencia modernista. En el otro lado se ha ubicado el salón. Los techos altos y los elementos recuperados generan estancias amplias y llenas de luz.
El resto de la distribución se ha mantenido intacta, con tres dormitorios y dos baños con acceso desde un largo pasillo. Algunas de estas estancias dan a pequeños patios interiores que permiten la ventilación natural.
Reviviendo los elementos originales
Ocurre en muchas ocasiones que antiguas reformas acaban con elementos originales de viviendas con décadas de historia. El afán por derribar lo viejo y construir lo nuevo elimina cualquier rastro de vida anterior. El estudio Forma ha recuperado los elementos modernistas para volver a llenarlo de vida desde un punto de vista contemporáneo.
Se conservan y restauran las puertas interiores y balconeras, incluyendo pomos, molduras, arcos y hasta los vidrios superiores esmerilados. Así, se recupera gran parte de la esencia de la vivienda. El pavimento de todas las estancias, muy deteriorado, no pudo rescatarse, por lo que se diseñó uno nuevo para toda la vivienda.
Diseño de baldosa hidráulica
Para el diseño del pavimento se generó un patrón distinto en cada zona de la vivienda, como se hacía antiguamente, utilizando uno para la cocina, uno para los dormitorios y otro para el pasillo y salón. Se consigue unidad utilizando el mismo color en todos los patrones: un verde muy vivo sobre un fondo blanco. Los zócalos y molduras se rehacen siguiendo las mismas leyes que en 1900.
Dotando de entidad propia a los baños
Este piso de 110 m2 cuenta con dos baños completos que reciben un tratamiento diferente al del resto de la vivienda. Se colocan puertas metálicas de líneas rectas con vidrios translúcidos, en las que se emplea la misma proporción que en el resto de carpinterías antiguas de la vivienda. Con esto consiguen crear una contraposición que pone en valor ambos diseños: el modernista y el contemporáneo.
Para el suelo y parte de la pared frontal se utiliza gresite de color negro, que contraste con el azulejo acabado brillo del resto de paredes.
Fotografía: José Hevia