Objetos comunes, con mucho significado, en el Museu del Disseny.
Justo siete años después de su inauguración, el Museu del Disseny de Barcelona renueva la exposición permanente de diseño de producto. Cambia de sala (más accesible), añade un centenar de piezas y nuevos formatos expositivos, más inclusivos. Es su apuesta para llegar a un público más amplio y poner en valor el patrimonio del diseño local.
Seguir evolucionando
En diciembre de 2014 se inauguraba el Museu del Disseny de Barcelona en el nuevo edificio Disseny Hub, obra del estudio de Oriol Bohigas. «Fue el ánima del proyecto», explica Pilar Vélez, directora del DHub. «Él impulsó la creación de la primera colección de diseño de producto, y es la única colección de diseño catalán y español patrimonial.» Caprichos del destino, el fallecimiento del célebre arquitecto barcelonés ha coincidido con el renacimiento de «su» exposición.
Igual que hay que renovar una casa con el paso de los años, el Museu se ha embarcado en un re-styling de la muestra permanente de diseño industrial patrio. Los tiempos evolucionan y, precisamente, el diseño es uno de los motores de cambio más significativos. Tocaba actualizar.
Con «Del mundo al museo», la anterior exposición permanente, la entidad quería legitimar el diseño como patrimonio cultural. Hoy, pasados siete años, el objetivo es actualizarla y ampliarla con los cambios acontecidos en los últimos tiempos (tecnológicos, sociales y medioambientales), así como acercar el diseño de producto al gran público.
El comisariado se ha encargado al historiador y diseñador Oriol Pibernat, que ha hecho una reordenación de las piezas y una puesta en escena más clara. Ahora se acentúa mucho más el valor de cada objeto, suscitando mayor interés por averiguar qué particularidad lo ha llevado a formar parte de la colección.
Itinerario. Historia cronológica de nuestro diseño
La instalación se divide en cuatro ámbitos con un hilo común: explicar por qué el diseño ha sido esencial en la transformación de la sociedad. El primero, llamado Itineriario, es un recorrido cronológico por la historia del diseño local, desde 1930 hasta la actualidad. Aquí se muestra la evolución del diseño, desde su vinculación inicial -casi única- al mobiliario (sillas y lámparas por doquier, con permiso de la fregona); a su posterior incursión en el ámbito automovilístico o de los pequeños electrodomésticos en los sesenta (la Impala de Leopoldo Milá, el Citromatic de Dieter Rams+Gabriel Lluelles…); las nuevas editoras de finales de los setenta y su eclosión en los ochenta (Mobles 114, BD Barcelona, Santa&Cole); la etapa dorada de las Olimpiadas y de Vinçon; hasta el nuevo milenio, que se profundiza en el segundo ámbito de la exposición: Parlamento.
Parlamento. Objetos actuales que rompen estereotipos
En la sección Parlamento los objetos se organizan por temática y se apoyan con materiales audiovisuales para completar la explicación de su naturaleza. Son pieza más enigmáticas, que invitan a establecer un diálogo, a descubrirlos. Aquí encontramos ingenio e innovación en distintos terrenos: nuevos materiales, tecnología y neo-artesanía de la mano de Curro Claret, Martín Azúa, Guillem Ferran o Ernest Parera.
También hay foco en utensilios comunes y propuestas que pretenden dar respuesta a grandes dilemas sociales y medioambientales. La democratización del diseño.
Por último, Parlamento incluye productos que actúan como mediadores humanos, que incitan nuevos registros sociales y experienciales o conllevan propuestas alejadas de convencionalismos. Es el espacio de la urna Bio de Gerard Moliné, el método canguro Melic, el casco plegable Closca o la misteriosa cubertería de El Bulli.
Exposiciones variables: rotación de productos
La exposición se reserva una zona para pequeñas muestras temporales, que irán cambiando sin alterar el resto de ámbitos. La primera «exposición dentro de la exposición» está centrada en los iconos internacionales del diseño local. Incluye piezas que van desde los años 30 hasta la actualidad y que se han convertido en referentes mundiales del diseño, como el jarrón súper viril Shiva de Ettore Sottsass (editado por BD) o la lámpara Cometa de Disform.
El diseño en la ciudad
El cuarto ámbito se ubica en la calle. «Cuando sales a la calle empieza el diseño en la vida real. Empiezas a proyectar sobre el entorno con otra mirada», explica Oriol Pibernat. Y añade, «el mobiliario urbano que tenemos alrededor no está museizado pero entra en diálogo con la exposición». Así, el último apartado de «Objetos Comunes» explora la idea del museo sin paredes. A través de un código QR -o un plano- se puede visitar el mobiliario urbano y los equipamientos adyacentes con información detallada de las farolas, bancos, papeleras, marquesinas o pavimentos, esenciales para comprender la historia y evolución del diseño en Barcelona, Catalunya y España.
«Objetos Comunes. Historias locales, debates globales». Nueva exposición permanente de producto. A partir del 3 de diciembre 2022, en el Museu del Disseny de Barcelona. Plaça de les Glòries Catalanes, 37, 08018 Barcelona.