Si, nosotros también usamos cookies. Esas cosas con nombre de "galletita" que ayudan a que tu navegación sea más personalizada. Cierra este mensaje y nos darás tu permiso para seguir utilizándolas. Y seguirás disfrutando de diarioDESIGN como siempre.

Feliz viaje por nuestra web Cerrar

Vivir la Arquitectura en el histórico edificio La Costa de MBM.

Durante la Barcelona Design Week, el edificio La Costa del barrio de El Putxet abre sus puertas para mostrar la rehabilitación de una de sus viviendas. El estudio vilablanch se ha encargado de adaptar la casa, original de los setenta, a las necesidades del S.XXI.

Vivir la arquitectura desde la experiencia directa

“Del mismo modo que podría describirte una cantata de Bach pero para aprehenderla tienes que escucharla, es necesario visitar la arquitectura que queremos comprender.» Con estas palabras, Pati Núñez, fundadora del festival Open House Madrid y co-comisaria del último pabellón catalán en la Bienal de Venecia, explica la idea principal del programa Vivir la Arquitectura, que arranca su primera edición durante la actual Barcelona Design Week. Su objetivo es acercar la arquitectura, entenderla, a través de la propia experiencia. «Queremos proponer programas locales que permitan su visita y experiencia directa frente a los programas de las grandes ferias y bienales donde se teoriza sobre la arquitectura, pero solo se conoce a través de planos y fotografías, y a veces films», explica la divulgadora.

Edificio La Costa, arquitectura moderna en los 70

La primera edición de Vivir la Arquitectura se centra en el histórico edificio La Costa, de MBM Arquitectes. Ubicado en la calle que le da nombre, arriba de una pronunciadísima pendiente (muy típica del barrio de El Putxet de Barcelona), la construcción se dio a conocer durante la década de los 70 por ejemplificar la arquitectura racional. Proyectada por Oriol Bohigas, David Mackay y Josep Maria Martorell, pronto se convirtió en todo un símbolo. Su fama se agrandó, además, gracias al objetivo de Francesc Català Roca, que fotografió el proyecto como arquetipo de la vida moderna.

Cuarenta años más tarde, esa modernidad ya no es tan moderna. Aún así, el edificio sigue manteniendo una esencia especial, fuente de atracción de los amantes y aficionados a la arquitectura. Pocos podrán resistirse a su fachada; las ventanas de aluminio natural; la cerámica blanca del hall (más propia de espacios privados que públicos); los pavés de los rellanos; los fluorescentes verticales; el pavimento de goma pirelli; o las lámparas MBM originales.

Vivir-la-arquitectura-Edificio MBM-foto-Jose-Hevia-diariodesign

Innovative Showroom

Vivir la Arquitectura pretende reflexionar sobre el paso del tiempo y la habitabilidad de los espacios. Además de debates, el programa incluye la visita guiada a una de las viviendas del edificio, reformada por el estudio vilablanc.

El proyecto debía actualizar el espacio al modus vivendi y necesidades de la vida del siglo XXI. La distribución original de los años setenta marcaba la separación típica de las casas burguesas. Por un lado, el área habitable de la familia (salón, terraza, dormitorios, baños); por el otro, la de servicio (cocina, lavadero, cuarto de plancha).

La nueva distribución es un reflejo de la vida en 2020. La cocina, grande y abierta, se convierte en el núcleo principal del hogar, donde todo pasa. Aumenta la necesidad de baños. Y todas las áreas están más conectadas.

Esta conexión se logra abriendo espacios, añadiendo mayor flexibilidad (con puertas correderas que crean distintos ambientes para cada ocasión) y usando los materiales para aportar continuidad. El suelo, revestido con resina sintética de Kerakoll, es un claro ejemplo.

Exposición y debates

El programa Vivir la Arquitectura se completa con la exposición “Fábulas de ayer y de hoy” de Jordi Bernadó y el ciclo de debates “Next Talks: El reto de diseñar el futuro” con la participación de Benedetta Tagliablue, Elina Vilá, Josep Bohigas, Pati Nuñez, Josep Ricart (H Arquitectes) y Coque Claret.

Colaboración

Marcas colaboradoras en el proyecto Innovative Showroom: cocina: bulthaup Barcelona; revestimientos: Kerakoll; carpintería a medida: Carpintek; ventanas: Deceuninck; baños: Bathco y Lasser; domótica: Jung; mobiliario: Minim, Louis Poulsen, Olut, GAN, Bassols, Stua, Viccarbe.

Fotografía: José Hevia

Artículos relacionados

Revive la magia de los 90: la casa-cofre de Polly Pocket ahora en tamaño real

Somos Nido: el ‘caliu’ como bandera detrás de Norrsken Barcelona y la Llave de Oro

Un observatorio de aves en Holanda construido únicamente con paja y madera

White Stone House: líneas simples y rectas con vistas al Mediterráneo