Fundido a negro: el interiorismo más «black».
Las últimas tendencias muestran que el minimalismo está superado. Ahora toca destacar, y nada mejor que los colores para ello. Entre ellos, los oscuros han tomado protagonismo con su fuerza expresiva. El más dramático, el negro, aparece con nuevos matices que lo convierten en un tono sorprendentemente versátil.
En un loft a orillas del Báltico.
Loft Kolasiński firma esta diáfana vivienda ubicada en la ciudad de Szczecin.
Los autores han jugado con una reducida paleta de colores y materiales para paredes y suelos en la que domina el blanco. En contraposición, la mayoría de textiles son en tonalidades negras y grises.
Combinando necesidades y estilo en Taipei.
Este apartamento cambia radicalmente la distribución original para equilibrar las ideas de diseño que tiene el cliente con su auténtico estilo de vida.
Jugando con la luminosidad y la luz natural que entra por los grandes ventanales, el negro y el cemento fueron elegidos como color dominante para aportar sofisticación.
En un restaurante en Ontinyent.
Una constante: el interiorismo negro aporta sofisticación. Y la pareja que forma con el blanco es infalible.
La estudiada presencia de ambos colores en el restaurante Blanc i Negre de Ontinyent viene subrayada por las aristas del revestimiento y el mobiliario escogido. Toques maestros de Ramón Esteve, que de esto sabe un rato.
En una tienda en Hangzhou.
La escogieron como mejor interior del mundo en los premios INSIDE. Por algo será.
Un local poco convencional, que completamente envuelto en negro y grises oscuros funciona como telón de fondo de la colección de moda de Heike.
En la cocina, made in Ikea.
Rompiendo la formalidad. Desafiando lo establecido. Y llevando la economía circular a todos los hogares.
Así es Kungsbacka, la cocina modular creada por Form Us With Love a partir de botellas de plástico recicladas.
En un hotel-grúa, en el puerto de Copenhague.
Esta antigua grúa de carbón es negra en homenaje a su anterior uso, que ha cambiado radicalmente para aprovechar sus privilegiadas vistas. Probablemente, las mejores de la capital danesa.
Una experiencia inmersiva y multisensorial.
En una zapatería de Barcelona.
Aplicar el color negro suele ser fórmula infalible para resaltar el contenido por encima del continente. Y en la nueva Tascón, proyectada por Fernando Salas, se demuestra.
Las texturas y colores de las paredes originales pasaron a formar parte inseparable del proyecto. Convertidas en siluetas de distintos modelos de calzado, éstas se recortan sobre el fondo negro que cubre el espacio. La tapa de la metafórica caja de zapatos que define el proyecto.
En un pueblo de Aragón.
Una de las cualidades más valiosas de un diseñador es la capacidad de reinventarse. Y en este caso, Ramón Esteve lo cumple. Porque a sus casas luminosas y abiertas contrapone esta rehabilitación en Rubielos de Mora.
El interiorismo negro y gris en versión rústica se convierte en el mejor aliado de la piedra y el hierro forjado.
En un apartamento barcelonés.
Amplitud espacial y visual. Y dos colores básicos. Así es la reforma llevada a cabo por raul sanchez architects.
El negro se erige como el gran protagonista del espacio. Lacadas en negro, y con tiradores de latón, las puertas pivotantes de las estancias de invitados interrumpen la continuidad de los paramentos blancos.
En un restaurante de Madrid.
Los mejores pescados de nuestras costas se encuentran en este local de la capital. Su barra hace pensar en un barco varado y el ambiente recuerda al fondo del mar. En El Señor Martín, la esencia marina es oscura y natural. Como el océano.
Puedes ver más proyectos con el negro como protagonista en diarioDESIGN
