Un ajedrez de llenos y vacíos en Copenhague.
Este sinuoso bloque de viviendas se encuentra en Dortheavej, una zona al noroeste de Copenhague, caracterizada por la presencia de talleres de reparación de automóviles, almacenes y edificios industriales de los años 1930-50. El proyecto obedece a un encargo que Bjarke Ingels Group recibió de la asociación danesa sin fines de lucro Lejerbo, que promueve viviendas sociales para ciudadanos con pocos recursos.
El diseñador danés de espacios urbanos Jan Gehl redactó las directrices del plan de ordenación del área. En él se solicitaba la creación de un espacio público – muy necesario para la zona -, mantener abiertos los pasajes peatonales y conservar intacta la zona verde adyacente.
La característica fachada del edificio, un damero de llenos y vacíos, responde a su singular estructura prefabricada. Concebido como un muro poroso, el edificio se curva suavemente en el centro, creando una plaza pública que se abre a la calle en el sur y un íntimo patio ajardinado hacia el norte.
En el nivel de la calle, el edificio cuenta con pasajes que permiten que los residentes y el público en general pasen sin problemas al patio.
Viviendas modulares
Los módulos de alojamiento se repiten a lo largo de la curva y se apilan a la altura de los edificios circundantes. El apilamiento crea un espacio adicional para que cada apartamento tenga una pequeña terraza, lo que proporciona a sus habitantes un entorno para desarrollar una vida saludable y sostenible.
En la soleada cara sur, los balcones se retraen y agregan profundidad a la fachada, mientras que en el lado norte, la fachada es uniforme.
Largos tablones de madera cubren la fachada en todos los lados, resaltando los módulos y alternando su dirección, acentuando de esta manera el patrón a cuadros.
Los grandes ventanales que se levantan de suelo a techo permiten la entrada de abundante luz natural en las unidades de vivienda y amplias vistas exteriores al patio verde y al vecindario circundante.
El tamaño de los apartamentos varía de 60 a 115 m2 y todos los materiales que se han utilizado son muy sencillos, como la madera y el hormigón en colores claros que dominan en el interior y el exterior.
La fachada orientada al norte mira hacia un patio verde cerrado que los residentes en edificios vecinos pueden usar para actividades recreativas.
A principios de 2018, la Danish Association of Architects distinguió a BIG y a Lejerbo con el Lille Arne Award por su trabajo a favor de las cualidades espaciales y la estrategia de construcción con un presupuesto reducido en sus proyectos de viviendas asequibles.
Fotografías: © Rasmus Hjortshøj