Un COACH lúdico para atacar la obesidad infantil.
Creativo, interactivo y lúdico, COACH (Centre for Overweight Adolescent and Children’s Healthcare de Maastricht UMC+) da una respuesta poco convencional a la importancia de adquirir un comportamiento saludable desde una edad temprana. Para ello, desde Tinker Imagineers han creado un entorno estimulante, ajeno al mundo de los médicos y hospitales.
La arquitectura elegida fomenta la actividad y relación entre sus usuarios, a través de una configuración que coincide con la misión de COACH. «Se trata de empoderar a niños y jóvenes para encontrar su grandeza», señala el consultor creativo Ralf Lambie.
Avanzar jugando
En COACH, jugar es la mitad del tratamiento. Las consultas ocupan coloridos pabellones insonorizados, dispersos alrededor de dos cuadrados centrales. Entre ellos se cruzan líneas y planos que construyen campos de juego.
Completamente abierta, la sala de espera anticipa ya el interior. Diseñada como una suerte de patio de recreo, en ella desaparecen las tradicionales bancadas de asientos. En su lugar existen una gran variedad de juegos interactivos que incluyen estiramientos, escalada, balanceo o equitación, entre otros. Los jóvenes pueden, por ejemplo, tratar de mantener el equilibrio mientras recogen los productos saludables que caen en la pantalla.
Arquitectura interactiva
Un muro interactivo introduce a los participantes en el universo del COACH. “¿Sabías que el desayuno es la mejor manera de comenzar el día?” o “¿Sabías que tu cuerpo es como una batería recargable?”, son algunas de las preguntas que se plantean en él. Los niños pueden contestar a través de un sensor en la pared de madera que proyecta las respuestas sobre ella.
Todos los pabellones son únicos, en forma y color, con distintos asientos y muebles de pié. Para potenciar la temporalidad de la construcción, las estructuras están hechas de madera en bruto y las tuberías del techo se han dejado vistas. La iluminación resalta el entramado de líneas y planos que atraviesa el espacio.
«El enfoque del diseño y la estrategia del programa ha demostrado su gran efectividad» apuntan los responsables del proyecto. El 70% de los participantes pierde peso y adopta un estilo de vida más saludable bajo la supervisión del COACH. Para la fundadora del programa COACH, la pediatra Anita Vreugdenhil, «los niños se sienten como en casa y comienzan a explorar». «Aprenden sobre un estilo de vida saludable sin ninguna presión», añade.
Fotografía: Mike Bink (cortesía v2com)