¿Parasoles de crochet? El color teje el verano de Valverde de La Vera.
Nos encanta la iniciativa y el resultado.
«Los parasoles están hechos de plástico, para lo cual reutilizamos bolsas de la compra o de basura, que transformamos en largas tiras que son después tejidas», explican los responsables de Tejiendo la Calle. La técnica utilizada, el tradicional del ganchillo adaptado a mayor escala.
Protectores solares durante el día, los parasoles llevan incorporada una luz que se enciende por la noche, señalando el camino a la plaza del pueblo, punto principal de encuentro durante las fiestas. Una vez concluidas éstas, las piezas –ligeras y fáciles de guardar– son almacenadas para reutilizarse año tras año.
Los diseños, que representan las labores realizadas tradicionalmente en la zona, son propuestos por los propios participantes, que durante los meses previos a la instalación van tejiendo sus piezas de manera individual o asociándose entre si. Gestionada por la Asociación Cultural y Juvenil La Chorrera, la iniciativa incluye talleres de producción una vez al mes, donde se comparten conocimientos y experiencias. Porque, como afirma Jessica Hemmings en su libro ‘In The Loop, Knitting now’, «El acto de tejer se convierte en una metáfora de la vida diaria, y también en una herramienta para construir espacio, construir grupos y comunidades, actividades e ideales que de otra forma permanecerían escondidos, olvidados o perdidos».
«Es importante reconocer el valor de las labores realizadas históricamente por mujeres para la autogestión de sus propios hogares» añade Marina, que logra con este proyecto convertir elementos domésticos autoproducidos en una obra colectiva para toda la comunidad.
Fotografía: Lucia Fernandez Ramos