Haz tuya la pequeña bola metálica que ha cumplido medio siglo.
En un principio, este sistema fue creado para uso propio de la marca, pero los interioristas y planners del banco Rothschilld se enamoraron de él y quisieron hacer un pedido para amueblar la nueva sede del banco en París. Rothschilld fue su primer cliente y, así fue, como USM Haller, aunque originalmente no había sido concebida como una empresa comercial, se hizo popular entre los clientes y pronto aumentaron los pedidos de sus Sistemas Modulares. En 1965, el producto fue patentado y comenzó su producción en masa.
Actualmente, USM Haller es considerado un clásico del diseño y está presente en las colecciones y oficinas de los principales museos del mundo, como el MoMA y el Cooper-Hewitt National Design Museum de Nueva York. También en las Twin Towers de Viena de Massimiliano Fuksas o la Swiss-Re-Tower de Londres, de Foster & Partners. Se encuentra mobiliario de USM en el museo parisino de Frank O. Gehry para la Fundación Louis Vuitton y en el rascacielos The Shard de 310 metros de Londres de Renzo Piano. Los sistemas modulares USM se reconocen como obra de arte aplicada. Y eso, a nivel mundial, es mejor que estar protegido por una patente.
Para toda la casa… o donde sea.
Con el tiempo, la firma expandió la función original de sus muebles en espacios modernos de oficina y se integró también en muchos otros ámbitos de la vida. Siempre respetando que el diseño siga a la función.
La bola mágica, corazón del sistema
El secreto de USM es una brillante esfera metálica que es el centro de los Sistemas Modulares USM Haller, uniendo tubos metálicos de una forma única y estable. Más allá de su funcionalidad técnica, los seis orificios con rosca de la esfera cromada deben ser considerados como un símbolo: amplían las posibilidades de uso de todo el sistema modular en todas las direcciones, por lo que se puede formar de ello un sistema de módulos ampliable ilimitadamente.
Los accesorios y componentes de USM se perfeccionan continuamente de acuerdo con el estado más actual de la técnica, mientras que la imagen exterior y los principios básicos se mantienen intactos. De esta forma, se asegura que cada nueva pieza del sistema se pueda integrar en las estructuras ya existentes. Incluso los Sistemas Modulares USM construidos a principios de los años 60, aún se siguen usando y se pueden ampliar sin problemas. Para esto existe un término fijo dentro de la visión de los productos de USM: la retrocompatibilidad.
Make it yours
En 2015 el sistema modular USM Haller celebró su 50 aniversario, y en 2016 la compañía ha lanzado el nuevo configurador en línea bajo el lema “Hazlo tuyo”, uno mismo puede diseñar sus estantes y sus propios muebles de USM. Es fácil de usar, sencillo y rápido.
También los diseñadores y decoradores de interiores pueden integrar los muebles configurados en línea a sus herramientas de planificación, ya que los diseños se pueden descargar con una variedad de archivos compatibles con CAD: DWG, DWG2D, SKP; FBX y 3DS. Los materiales de acabado de USM también están disponibles a través del configurador.
Primero, tienes que determinar la estructura y el tamaño. Luego, sólo tienes que montar las puertas y los cajones como desees. Y, finalmente, le puedes dar al objeto el color que más te guste. La naturaleza flexible del sistema asegura que el mobiliario se adapte a las diferentes fases de la vida.
Como ejemplo, un pediatra en Morioka (Japón) renunció a instalaciones fijas y muebles empotrados para su vivienda y los arquitectos involucrados le dieron la solución: un amueblamiento intemporal, reutilizable y de configuraciones infinitas. Si algún día su hijo se encargara de la casa, podría reemplazar los muebles a su gusto.
!Larga vida a USM!