Londres vuelve a vibrar con la Clerkenwell Design Week.
Nada raro teniendo en cuenta que se celebra en una de las zonas de la capital inglesa con mayor tradición en la industria creativa. Situado en el distrito de Islington, al norte de la ciudad, el barrio de Clerkenwell ha recuperado en las dos últimas décadas el esplendor de la época de la Revolución Industrial siendo actualmente uno de los lugares preferidos de los estudios de arquitectura y diseño más creativos así como los showrooms de marcas internacionales de mobiliario y producto.
Hecha la introducción, centrémonos en las novedades de este año, que son muchas y muy variadas. Para ello vamos a seguir el recorrido que los arquitectos locales OMMX han ideado para facilitar la navegación por las más de trescientas empresas presentes y cientos de nuevos productos, desde pequeños accesorios para el hogar hasta grande piezas de inversión.
La exhibición se divide en ocho salas de exposición, cada una de ellas destinada a una rama o aspecto de diseño diferente.
Empezamos por la Design Fields, dedicado al diseño contemporáneo comisariado. Lo primero sería destacar que ha sido una de las más expectación ha levantado por su ubicación – cerca del Exmouth Market, una de las joyas de la zona – y su expansión hacia el norte. Lo segundo a remarcar son sus novedades. La lámpara Plane de la empresa sueca Zero caracterizada por su transparencia nitidez a partir de finos alambres de metal sobre una rejilla estructural. H Furniture, por su parte, ha presentado su escultural silla de madera y metal WW.
Segunda sala: la Platform, destinada a los más de cuarenta diseñadores emergentes seleccionados. Entre ellos, Oscar Francis o Lorna Syson. De aquí destacamos la obra ‘A Gilded Cage’, del estudio RCA Graduatesyenchenyawen y el pintor Archie Proudfoot, destinada a adornar las paredes celulares del recinto.
Tercera sala: Project. Ésta va dirigida a las grandes marcas internacionales. Aquí las novedades más marcadas fueron las de la danesa Palau, que presenta su butacón Rama y el sistema modular de asientos Corals, y la empresa de iluminación alemana Luctra, que lanza una nueva colección para oficinas que, según dicen, aprovecha los efectos positivos de la luz sobre el bienestar en el lugar de trabajo.
La cuarta sala es para los diseñadores británicos, de ahí su nombre: la British Collection. En un escenario tan extraordinario como la iglesia de St James, el mejor talento local exhibe sus obras y milagros. Por ejemplo, el mobiliario de cocina Pluck del estudio 2MZ, las lámparas de Hand & Eye Studio, y el debut del equipo de Very Good & Proper con su mesa VG&P Dowel Table.
Seguimos por la quinta sala: Additions, la cual recoge los pequeños accesorios para la casa. Como la colorida colección de cerámica de Taz Pollard a base de neones. Future Days, por su parte, presentó su mobiliario inspirado en la técnica del origami como la mesa Sapphire.
El Detail y el Detail Pavilion son dos salas pero en la práctica muestra lo mismo: interiores de lujo. El glamour y la artesanía más delicada juntas de la mano. Por ejemplo, las alfombras de Tania Johnson hechas en y con materiales de Nepal. O el mobiliario moderno de los italianos Fred & Juul pero inspirados en las técnicas tradicionales de la Toscana.
Por ultimo está la Icon’s House of Culture. Este espacio, situado en los antiguos almacenes Metropolitan Cold Stores, en Smithfield, acoge a marcas internacionales. Podríamos citar varios nombres pero nos quedamos con uno del que nos enorgullecemos por compartir raíces: la firma valenciana Expormim, especializada en muebles de ratán. ¿Quién dijo que este material está pasado de moda? No, en Londres y mucho menos en la Clerkenwell Design Week.
Fotografías cortesía de v2com.