A2arquitectos meten a los más pequeños en un caleidoscopio.
El cubo racional y neutro que se ve desde el exterior destaca por su sobriedad, que se ve alterada por un gran elemento que atraviesa todo el espacio: el caleidoscopio. Una sección hexagonal de 9 metros de longitud y 2 metros de altura permite a los niños caminar por su interior e interactuar con todo el espacio, formando parte del propio efecto caleidoscópico, percibiendo una extraña sensación de ingravidez sobre el parque.
Variables como los elementos externos, la luz natural y los niños en movimiento generan un juego de efectos de luces y reflejos que van modificando el espacio y creando múltiples mundos que permiten dejar volar la imaginación combinando las entradas y salidas del lugar.
La estancia principal que envuelve al caleidoscopio se caracteriza por su tonalidad rosa, color escogido porque «por su emoción relajada potencia los sentimientos, convirtiéndolo en otro elemento más para la creación» en este espacio de ensueño. Todo ello ayudado por un patrón aleatorio de círculos blancos de distintos tamaños, que sirven para albergar la iluminación, como espacios de almacenamiento, pizarras, entradas a otros espacios…hasta escondites.
El resto de estancias complementarias: el baño, la escalera, la habitación mágica, el periscopio, la mezanine… responden a diferentes experiencias sensoriales donde también se juega con espacios, colores, reflejos, fluorescencias y texturas. Tratados como proyectos individuales, cada uno de estos rincones sigue su propio lenguaje diferente al resto del conjunto, pero manteniendo la idea común del mundo de los sueños.
Fotografía: Laura Torres Roa
Hotel Castell dels Hams Carretera Manacor – Porto Cristo Km. 10 07680 Porto Cristo, Mallorca
