El fotógrafo Jordi Bernadó revisita Ullastret, una remodelación de Josep Lluis Mateo.

Este entorno medieval se caracteriza por la yuxtaposición de elementos inconexos, el producto de diversas y lógicas intervenciones. El arquitecto Josep Lluis Mateo concibió la pavimentación de este entorno medieval en verano de 1982 y según él mismo comenta, “tuve la suerte de comenzar a construir a principios de 1983, sin aguantar la larga espera que se produce con frecuencia. La construcción fue difícil (…) pero tuve la suerte de contar con el apoyo de mi cliente, la Dirección General de Arquitectura de la Generalitat de Catalunya, y también la colaboración de una empresa de construcción pequeña, pero con los artesanos calificados, capaces de trabajar con el amor casi arcaico que requiere el trabajo”.

Ahora, 20 años después, el fotógrafo Jordi Bernadó revisita esta obra que para el arquitecto aparece nueva, colorista, viva.

Según sus palabras, “recuerdo la visión del camino (que Bernadó recoge), construido señalando la traza continua del movimiento. Piedras que permanecen y nuevos accidentes que señalan la transformación. Aunque el suelo muestra base, como geometría y soporte, subsiste impertérrito”.