The Book Club, un multiespacio vanguardista que fusiona cultura, ocio y restauración en East London.

Su interiorismo recuerda el de una típica cafetería neoyorkina, pero The Book Club se ubica en un almacén de un edificio victoriano de Londres, y se ha convertido en poco más de dos años en el lugar de encuentro de la gente chic de la City. La joven diseñadora Shai Akram ha dejado su huella en este vanguardista multiespacio abierto los siete días a la semana desde primera hora de la mañana hasta la madrugada en el que se puede tomar algo a todas horas, asistir a una exposición o jugar a ping-pong, entre otras actividades más. The Book Club es un todo en uno.

Dividido en dos plantas, una a nivel de calle y la otra en el sótano, The Book Club ofrece un diseño único y divertido pensado para revolucionar culturalmente la escena del barrio de Shoredich de Londres. Igual que su interior, este multiespacio ofrece un ecléctico programa de eventos y actividades sociales de música, arte, cine, moda, filosofía, dibujo, artesanía y ciencia.

Las paredes del antiguo almacén se muestran desnudas, presumiendo de esqueleto y dotando el local de un cálido color teja. La fachada exterior, sin embargo, es la excepción: enormes ventanales dan directamente a la calle para dotar al espacio de iluminación natural, aire y mayor amplitud.

Dos grandes circunferencias abiertas expresamente interrumpen los muros principales de la planta baja, comunicando visualmente las diferentes estancias.

Todas las sillas, mesas y sofás son distintos los unos de los otros, testimonios de épocas variopintas, un detalle que le da personalidad al club. Las largas mesas comunales, el último grito en restauración, invitan a relacionarse con los demás comensales. Cortinas, alfombras y demás telas tienen un toque vintage.

Lo que más llama la atención del sótano, donde tienen lugar proyecciones de cine, conferencias, noches de baile y eventos privados, es sin duda el techo decorado por un tapiz de bombillas.

A modo de nube, la intención de Akram es la de inspirar una fructífera lluvia de ideas de los jóvenes aquí reunidos. En la librería del fondo, se pueden encontrar infinidad de ejemplares de libros antiguos para leer. En The Club Book es imposible aburrirse.

Imágenes cortesía de Sylvain Deleu y de The Book Club