Casa Bahia de Marcio Kogan. Ecologismo a la brasileña.
Una casa definida por el propio arquitecto como “ecológica, pero no tecnológica”, ya que no se ayuda de ningún avance técnico para ahorrar electricidad. Simplemente es una casa hecha con los materiales y las técnicas de la arquitectura tradicional de la zona, que ha sabido adaptarse bien al clima cálido durante siglos, reinventándose e incorporándose a la arquitectura brasileña moderna.
Según el propio arquitecto: “ La casa no usa un software verde, no se hacen cálculos por equipos sofisticados. Los constructores de Bahia sabían hacer casas con interiores frescos mucho antes de que la ideas lecorbusianas se tropicalizasen, e incluso antes de que Sir Norman Foster hubiese dado una dimensión científica, precisa y tecnológica a la arquitectura sostenible. Las casas en Bahia tienen tejados de tejas, un material rústico y banal, y techos de madera. Los grandes paneles de madera en celosía que hacen de paredes, de origen árabe y traídos a Brasil por los colonos portugueses, han estado en nuestra arquitectura desde los principios de la colonización. “
Y así está construida la Casa Bahia, con paredes correderas de celosía de madera que proveen de confort al interior –incluso cuando la temperatura exterior supera los 40º-, con techos de teja y madera y con patios interiores que permiten la ventilación cruzada de los espacios principales. El patio central permite, además, que toda la casa tenga vistas al frondoso jardín presidido por dos mangos exhuberantes.
El resultado, no sólo una casa tradicionalmente ecológica, sino una vivienda espectacular de casi 700 m2, rodeada de una impresionante naturaleza, y con unos interiores exquisitos.
El arquitecto Marcio Kogan, nacido en Brasil hace 57 años, es considerado como continuador de los grandes arquitectos modernos brasileños: Lucio Costa, Oscar Niemeyer, Lina Bo Bardi o Vilanova Artigas. Su trabajo más reconocido y premiado se ha desarrollado en proyectos de residencias privadas, de estilo elegante y minimalista. Se le atribuyen influencias arquitectónicas de Ludwig Mies van der Rohe o Frank Lloyd Wright, pero a él, enamorado del cine, le gusta declararse discípulo de Ingmar Bergman, Federico Fellini y Andy Warhol. Además de gran cineasta, Kogan adora tanto su natal São Paulo como Nueva York, ya que son parecidas en su caótica fealdad y su mezcla de energía multicultural.
Fotografías cortesía de Nelson Kon