Olnick Spanu House en Nueva York, de Alberto Campo Baeza.
El despacho madrileño Estudio Arquitectura Campo Baeza ha diseñado esta casa valientemente contemporánea y minimal en un entorno de naturaleza exuberante, un exclusivo enclave en el estado de New York. La vivienda unifamiliar Olnick Spanu, con un total de de 900 m2 construidos, se ha planteado como un volumen formado por dos cajas: una hermética de hormigón como base inferior y una ligera de cristal que descansa sobre la primera.
Junto a las profundas aguas del río Hudson, en medio de un paisaje de profunda tranquilidad donde se alternan los días de lluvia y niebla con las mañanas de luz intensa, la vivienda surge valiente entre el bosque espeso. Con sus formas ortogonales y construida de hormigón, cristal y acero, la construcción toma cierto aire místico en este espectacular lugar que parece tan cercano al cielo.
La casa está situada en un terreno donde antiguamente había una pequeña cabaña, sobre un suelo rocoso que se ha dinamitado para albergar los cimientos de la nueva construcción. Se han tenido que construir dos muros de contención, con una longitud de 50 m de largo cada uno, para sostener el nuevo edificio. La base de la vivienda es una gran caja alargada de hormigón de 40 m de largo por 18 m de ancho por 4 m de altura. La cubierta de esta planta baja se ha pavimentado de piedra de manera que se crea una terraza accesible desde el primer piso. Con aberturas mínimas, en esta planta se han situado las zonas privadas, que contienen los dormitorios y los baños.
Para poder disfrutar de las inigualables vistas, la planta de espacios públicos se ha situado en el nivel más elevado. Sobre la base casi hermética de hormigón encontramos el primer piso, una caja acristalada de 30 m de largo por 8 m de ancho con una cubierta plana acabada con un voladizo que sobresale 3m. Esta cubierta está sostenida por una ligera estructura de 10 cilindros de acero que se han dispuesto según una retícula de 7 por 7 m. La fila trasera de los pilares está situada dentro del cerramiento acristalado, mientas que la fila delantera se ha dejado fuera para acentuar la transparencia. Este primer piso acristalado contiene la cocina, el salón y el comedor, y se ha dividido en tres áreas mediante dos cajas blancas que no alcanzan el techo, conteniendo las escaleras y los espacios de servicio.
Todo el interiorismo de la vivienda responde a la misma estética que la arquitectura: grandes espacios casi vacíos con piezas escogidas de mobiliario de Knoll, Edra, B&B o Cassina. En un vestíbulo central, conectando la entrada principal con los accesos al jardín, se ha creado una galería donde se exponen piezas de Arte Povera junto a otras piezas de arte italiano contemporáneo, presente en todas las estancias de la casa.