Qbic Hotel London City, diseño y tecnología para este hotel sin reglas en el Este de Londres.

El estudio londinense Blacksheep, responsable del interiorismo de los restaurantes del chef Jamie Oliver, ha dotado de personalidad al hotel creando espacios comunes igual de heterogéneos que la clientela y habitaciones con un aire futurístico.

Ver el trabajo de Blacksheep en el Jamie’s Italian Gatwick en diarioDESIGN.

El icono de los hoteles Qbic es el cubo, pero más allá de este elemento, no hay reglas ni estructura definidas en cuanto al diseño o la propia concepción del hotel. Está en constante evolución.

Tecnología y diseño, eso sí, son marca de la casa. Así pues nos encontramos con mesas con ipads integrados, una original señalización en las áreas de circulación y llamativas lámparas colgantes.

Las zonas comunes destacan por una paleta cromática de grises con pinceladas de amarillos, naranjas y rojos vibrantes, y un mobiliario con piezas originales como mesas en forma de bandejas y estanterías de almacén. Una mezcla donde se utilizan tejidos cálidos como la lana y se revisten las columnas con baldosas blancas; rótulos retroiluminados y cestos de colores como lámparas de techo.

Las habitaciones, llamadas Cubis, rinden homenaje, cómo no, al cubo. El blanco impera en este espacio con camas con esta forma geométrica. El color aquí lo marcan las ilustraciones y lámparas de pie que simulan un enredo de alambres, las cuales pueden verse en otras estancias del hotel.

Por último, con ánimo de integrar a la comunidad local de la zona, el hotel está pensando para que también puedan disfrutarlo los vecinos, los artistas locales y pequeños comerciantes como los panaderos de la zona.