Lobster reconfigura su imagen con una nueva apertura en Barcelona

Nuevo modelo

La proximidad dentro de la esfera comercial es un valor que sigue reivindicándose hoy en día. La comunicación directa y sin intromisiones de terceros, que ponga más el acento en el comprador que en el producto en sí, revaloriza la metodología de una marca y reconoce positivamente su relación con el cliente. En esta dirección ha abierto Lobster su tercer local en Barcelona: con el objetivo de ofrecer experiencias boutique en espacios pequeños, la firma ha inaugurado el nuevo espacio en el barrio de El Born.

Los materiales clave utilizados -con la participación esencial del estudio de arquitectura El Departamento- en el diseño son el acero inoxidable, que desde la firma aseguran que consigue realzar los detalles de todas las gamas, el cemento y la piel vegana, trabajados desde un monocolor kaki que refleja los rasgos que deben liderar el nuevo futuro de la marca. En total, el local suma cuarenta metros cuadrados y está supervisado por cuatro nuevos profesionales, que se añaden a las más de cuarenta personas que completan la plantilla actual.

Con una ventana que da directamente a Santa María del Mar, el nuevo local está situado en la Plaça del Fossar de les Moreres. Las otras dos tiendas que la compañía tiene abiertas en Barcelona se encuentra en la calle Verdi y en Consell de Cent. La ubicación de esta tercera tienda reemplaza al primer espacio de la marca en Calle Antic de Sant Joan, a pocos metros de distancia.

Ese primer centro se remonta a cinco años atrás, en un local de 25 metros cuadrados. Óscar Valledor, cofundador y director ejecutivo de la compañía, ha valorado esa primera tienda como el lugar que “nos permitió aprender, conocer y mejorar gracias a las visitas y el cariño que hemos recibido desde el primer día que abrimos”.

Cinco tiendas físicas

Sin embargo, Valledor asegura con relación a esta nueva apertura que “hemos hecho un ejercicio de renovación en el que nos hemos volcado sobre todo en asentar las base de lo que serán todas las nuevas ópticas de Lobster”. En esta dirección, la nueva óptica cuenta con zonas delimitadas para atender a cada cliente de manera personalizada, desde la parte expositiva de los productos hasta la zona orientada a los exámenes visuales.

Lobster nació en 2018 con la idea de renovar y rejuvenecer el sector de la óptica, buscando eliminar intermediarios de la cadena de suministro y ofreciendo una experiencia completa al cliente. En total, la marca lleva facturados más de cinco millones de euros y cuenta con más de 20.000 clientes. Actualmente, opera tanto en ecommerce como en retail, sumando cinco tiendas físicas repartidas entre Barcelona, Madrid y Valencia.