De estación de tren a alojamiento de lujo: nostalgia y sofisticación combinados en este hotel en Canfranc.
Hotel Royal Hideaway es mucho más que un lugar donde dormir entre los pirineos de Aragón. Si el entorno ya resulta idílico, la experiencia se completa al saber que puedes alojarte en este hotel en Canfranc que hace casi cien años fue una de las estaciones de trenes más grandes de Europa.
Próxima parada: Canfranc
España cuenta con varios edificios históricos restaurados, pero el de la estación de Canfranc es diferente. Los orígenes de este emblemático espacio se remontan a 1928, cuando el rey Alfonso XIII inauguró la estación de Canfranc entre los pirineos de Aragón y siendo hasta entonces la segunda mayor estación de trenes de todo Europa.
Casi cien años más tarde, el edificio vuelve a cobrar vida, dando lugar en un hotel de lujo: Hotel Royal Hideway. Grupo Barceló fue el encargado de recuperar este icono del siglo XX y transformarlo en un espacio referente de diseño, gastronomía y experiencias únicas.
El Gobierno de Aragón, propietario de la estación internacional de Canfranc, destinó 15,7 millones de euros para la rehabilitación. El proyecto original fue diseñado por el ingeniero alicantino Fernando Ramírez Dampierre, quien a principios del siglo pasado plasmó este edificio modernista de 241 metros de longitud.
Recuperación histórica con elementos art déco y modernistas
La tarea de rehabilitación fue ejecutada en colaboración de Acciona y Avinitia Construcción, mientras que el interiorismo corrió a cargo de Ilmio Design. Las obras para volver a dar vida a la estación de Canfranc no fueron fáciles debido al clima adverso de la zona, donde abundan las lluvias y las bajas temperaturas.
Otro de los retos fue poder conservar los elementos arquitectónicos y ornamentales de la estación, pero adaptándolos al hotel. La marquesina original metálica se ha mantenido tras un proceso de estudios cromáticos en laboratorio para determinar los colores reales de la fachada y carpintería del edificio.
El preciso y extenso trabajo ha dado como resultado este magnífico hotel en Canfranc, manteniendo la esencia tradicional de la estación de trenes. La gama cromática es un homenaje a los años 20, donde predominan los tonos beige y verde.
Los materiales utilizados en Royal Hideway son la madera, el latón o el terciopelo, todos provenientes de Aragón. El hotel ha contemplado el diseño de espacios cálidos y elegantes, con elementos art déco y modernistas.
Un hotel premiado por su sostenibilidad
A pocos meses de su inauguración, el hotel de Canfranc ya cuenta con un premio. El edificio se alzó con un Re Think Hotel, como reconocimiento a uno de los mejores proyectos de sostenibilidad y rehabilitación hotelera del país.
La envolvente del edificio está recubierta de un aislamiento de 240 milímetros que, junto con el cambio de carpintería, el consumo energético del hotel es relativamente inferior al resto de los edificios de la zona.