El azul petróleo dinamiza esta vivienda de estilo new nordic en Gernika.
En un antiguo edificio del centro histórico de Gernika, Lázaro Estudio ha proyectado una vivienda repleta de diseño, carácter y mucha música. En ella, un sobrio azul petróleo funciona como hilo conductor para coser con maestría su interiorismo.
Zona de día y de noche
A la hora de plantear la distribución de esta casa, jugar con la zonificación fue fundamental para Lázaro Estudio. Un pequeño recibidor da la bienvenida al hogar desde su puerta de entrada. En él, aparece un gran espejo redondeado que maximiza el espacio y sirve como teaser del resto de la vivienda.
Este recibidor se abre hacia la zona de día, compuesta por la cocina y por un amplio salón con el comedor integrado. Un espacio muy luminoso que combina la elegancia de las molduras en paredes y techos con el estilo del minimalismo nórdico.
Al cruzar este espacio, un pasillo conduce hasta la zona de noche. En ella, se encuentran los dormitorios, el vestidor, el baño y los espacios más privados. Cada estancia respira la misma atmósfera de calma que la anterior. Una sensación lograda a través de la vegetación y la elección de materiales nobles y naturales, así como con una paleta cromática que evoca calidez.
La cocina es el alma de la casa
Lázaro Estudio ha diseñado una cocina que se convierte en la absoluta protagonista de esta reforma. Enmarcada en un imponente cubo en un tono azul petróleo, la cocina delimita las dos zonas de la casa. Un espacio preparado para ser punto de encuentro o zona de paso. Su doble acceso permite una circulación más ágil entre las estancias y las unifica a través del color.
Además, desde ella se obtiene una panorámica completa de la zona de día. Sus cristaleras la integran en el resto de la vivienda y la convierten en el corazón de la casa. A través de ellas, la cocina recibe un chorro de luz natural que convierte este módulo en una gran caja de luz.
Azul petróleo: serenidad y carácter
El profundo azul petróleo de la cocina se desliza por cada rincón del interiorismo de esta casa. Un color que tinta paredes, muebles, tiradores y textiles. Lázaro Estudio demuestra con sutileza que la decoración de la vivienda está pensada al detalle.
El azul petróleo es fuerza, serenidad y elegancia. Se funde a la perfección con los materiales nobles como las puertas de roble natural, la carpintería y el suelo de madera. Los elementos decorativos elegidos potencian ese contraste cromático a través de tonos neutros, vegetación y mobiliario de líneas sencillas.
Una joven pareja de músicos
La reforma debía definir la personalidad y los hábitos de sus propietarios: una joven pareja de profesores de música. Por eso, fue necesario que el cuarto arte ocupara un lugar privilegiado en la vivienda.
De esta forma, se ha creado un acogedor refugio dedicado a la música, en el que lucen con orgullo una maravillosa colección de discos e instrumentos, libros y muchas plantas.
Fotografía: Erlantz Biderbost