El nuevo Hotel Bienvenir en Madrid es un cóctel de art déco y color.
El estudio creativo Wanna firma el divertido diseño del nuevo Hotel Bienvenir en Madrid. Con elementos originales de 1929 restaurados, mantiene un espíritu art decó renovado con un estilo colorista y minimal.
Hotel Bienvenir Madrid, por Wanna
Ubicado en plena Gran Vía de Madrid, el nuevo Hotel Bienvenir, es un cuatro estrellas que promueve su propia filosofía de viaje. Cada detalle en su diseño, firmado por el estudio Wanna, refleja una imagen de marca concreta y compacta. Su propio nombre hace referencia a una bienvenida de brazos abiertos, al mismo tiempo que señala el arte del cuidado y la atención por cada uno de los detalles. Desde la señalética para las puertas de sus 45 habitaciones, hasta los colores y conceptos utilizados para el interiorismo, todo respira un estilo fresco y equilibrado.
Mirada al pasado
La esencia e historia del edificio, concebido en los años 30 por los arquitectos Vicente García Cabrera y Jesús Carrasco Muñoz, ha sido respetada y restaurada. Esta antigua construcción pasó de ser una casa de alquiler a una pensión. En 2019 un grupo inversor extranjero lo compró para convertirlo en el hotel actual.
El mármol de la entrada, de la escalera y el acceso al ascensor; el suelo de madera de las dos últimas plantas, las molduras, las vidrieras, la puerta de la antigua garita del conserje… Todos los elementos originales han sido preservados siguiendo la normativa local. Lo histórico y lo contemporáneo se ponen en diálogo a través de un diseño refrescante, colorista y muy gráfico. Una fusión entre el ayer y hoy, con un estilo art decó minimal que aporta mucha personalidad a cada una de las estancias.
Universo visual
Desde la recepción, pasando por la sala de estar, las habitaciones privadas, el restaurante o los baños, se mantiene un concepto fluido y coherente en el que reina el contraste de color. La apuesta por una iluminación muy teatralizada, con apliques y detalles en latón en las luminarias diseñadas por el propio estudio, aporta el toque sofisticado y elegante.
La nueva materialidad parte de la propia arquitectura del edificio: de sus mármoles en blanco y negro, de sus suelos en espiga y de sus vidrieras coloristas. Ese guiño al pasado del edificio se conjuga con otros materiales más modernos. Tal es el caso de porcelánicos, metales y azulejos de tonalidades frescas, con colores vibrantes como el rosa y el mango.
En cuanto a las habitaciones, los creativos de Wanna han diseñado una pieza de mobiliario compacta y visualmente liviana que permite un uso flexible de los espacios. Ya sea como zona de descanso o para trabajar, los dormitorios ofrecen un espacio acogedor, con colores suaves y neutros y toques vívidos de color. El hotel cuenta con 45 habitaciones. En concreto, 5 suites con terraza, 4 con balcón en chaflán y 36 habitaciones estándar.
Destaca especialmente la sala de estar, situada en la primera planta y con vistas a la Gran Vía. El espacio multifuncional y flexible, en tres alturas, proporciona todo tipo de rincones acogedores y dinámicos. La geometría toma también el protagonismo en la composición de los espacios. A través de estructuras semicirculares se logran rincones con mucha intimidad. El resultado es una sala perfecta para desayunar, trabajar o desconectar, según las necesidades de cada cliente.
La señalética funcional del hotel, diseñada por el mismo estudio creativo, también ha sido cuidada al detalle, proporcionando una imagen coherente y equilibrada como hilo conductor. El grafismo se convierte así en una parte importante. Como un elemento decorativo más, contribuye a potenciar la atmósfera depurada de todo el concepto.
Fotografías: Caulin Photos
Hotel Bienvenir. Gran Vía, 56. 28004 Madrid.