El Caractère de la porcelana francesa, por Noé Duchaufour-Lawrance.
Los diseños de Noé Duchaufour-Lawrance se han caracterizado siempre por el respeto casi reverencial al trabajo artesano y al buen saber hacer de Francia. Lo que le convertía en la perfecta elección para celebrar el especial aniversario de Revol.
Caractère francés
Caractère es una vajilla de diseño acogedor. Que se caracteriza por una paleta de colores cálidos, desprovisto de adornos excesivos, y bautizada con nombres inspirados en especias.
Su nacimiento es la base de la inspiración. Como nos cuenta Duchaufour-Lawrance, «nació de una línea de carbón moviéndose libremente sobre el papel, como un dibujo, donde la línea describe los movimientos de un gesto con la mano, imperfecto y en ocasiones desobediente».
El resultado se ha visto por primera vez en la edición de septiembre de Maison & Objet. Los bocetos se han traducido en bellos objetos tridimensionales. Eso sí: mantienen los contornos irregulares del contorno, fieles al concepto original.
«Las imperfecciones», nos explican desde la marca, «añaden carácter (Caractère, en francés: de ahí su nombre) a las piezas». Además de que encajan a la perfección en el frágil equilibrio entre el material cerámico y la fabricación, dando a las piezas una fuerte presencia física. Un contraste en el que se mueve como pez en el agua el diseñador.
Revol: la porcelana francesa tiene nombre propio
Nueve generaciones de la misma familia han pasado desde la fundación de Revol en 1768, en la región de Drôme en Francia.
Una longevidad, los 250 años que celebran ahora, con un secreto muy claro: la innovación y la creatividad. La empresa ha sido capaz de modernizarse sin traicionar sus valores fundamentales, mientras mantiene el apetito por el riesgo. Noé Duchaufour-Lawrance es el último eslabón de una cadena en la que la porcelana francesa es la verdadera protagonista.