Huertos urbanos. La agricultura de gran altura llega a Milán.
A pocos metros de la famosa catedral, se levanta este paradisíaco jardín al aire libre, construido con un sistema modular a base de palets con el que se pretende crear una estructura de fácil montaje que combine estética y funcionalidad a un precio razonable.
Orto fra i cortili busca convertirse en un sistema replicable a gran escala para la reconversión de áreas urbanas infrautilizadas. Huertos urbanos en las ciudades, en las alturas. Se trata de un proyecto de mejora energética de edificios, un instrumento paisajístico, decorativo, de autoproducción de alimentos, un nuevo espacio de entretenimiento, socialización y coworking.
Diseñado en colaboración con el arquitecto paisajista Cornelius Gavril, retoma el tema de la agricultura urbana, pero va más allá del concepto de alimentos kilómetro 0, ya que tiene también una vocación docente, y se pretende utilizar para impartir talleres sobre el ciclo de crecimiento de las plantas, especialmente a los niños.
Por descontado, el equipo de Piuarch disfruta del espacio en sus pausas y reuniones de trabajo, y asegura agradables vistas a las personas que viven a su alrededor, mejorando a la vez el rendimiento térmico del edificio.
De carácter dinámico y versátil, el jardín se transforma todas las temporadas, y puede modificar también completamente su diseño gracias a su sencillo y modular sistema.
De esta manera se convierte en un trabajo en progreso que cada año se enfrenta a un cambio radical en su configuración manteniendo intacta su filosofía.
El proyecto se inspira en movimientos urbanos internacionales, mostrando que es posible trabajar en espacios residuales y convertirlos en puntos de referencia a mayor escala.
Fotografías: © Daniele Cavadini