Madness Creamery: una heladería no convencional en Perú.
Inspirada en el frío de los productos que vende, su diseño simula la atmósfera de una cueva de hielo, con una distribución semejante a algunos comercios de este tipo característicos de los Estados Unidos: una barra que cuenta con una losa de granito congelada en la cual los helados y varias coberturas y agregados se mezclan a demanda del cliente, creando siempre nuevas combinaciones.
Para insistir sobre las posibles mezclas, el pavimento escogido para el interior se ha hecho con figuras de mosaico artesanal que contiene triángulos de color en combinación con el techo del mostrador, y que se reproducen también en otros elementos del espacio. Parten de la base del diseño gráfico corporativo de la empresa de café orgánico de la selva, que ahora se ha expandido hacia nuevos retos comerciales.
El techo, también formado por piezas triangulares, acentúa el concepto de la cueva de hielo, con la intención de dar al visitante la sensación de estar dentro de una cueva con estalactitas, también pintadas con los colores de la marca. Las luminarias se han dispuesto entre estos elementos escenográficos con el fin de pasar desapercibidas, centrando la atención en el producto y el color.
La barra se convierte en uno de los elementos principales en el espacio, y para generar ese ambiente ‘polar’ incorpora piezas de cuarzo blanco triangulares con alto y bajo relieve, tratando de percibirse como un único bloque de hielo tallado.
Los muebles, sofás y puffs son de madera y tapicería, mientras todo el mobiliario de la zona de servicio se ha hecho de acero inoxidable, dándole ese aire yanqui de los años 50.
Fotografías: id 12º 77º