Juego de volúmenes en la nueva villa de PGA Catalunya Resort.
Una gran piscina desbordante supone el particular guiño al lago, naciendo bajo el voladizo y extendiéndose a lo largo de toda la propiedad. Dos grandes terrazas, un porche y una barbacoa la rodean, creando de esta forma un escenario ideal para aprovechar el envidiable entorno en cualquier época del año.
Los interiores de la casa, también de color blanco, están caracterizados por su espaciosidad y altura. Hay cuatro habitaciones, dos de ellas en suite, que ocupan la parte superior del inmueble y cuentan con generosas terrazas. Todas las estancias se prolongan con espectaculares vistas hacia el lago y al paisaje.
En la planta baja se ubican el salón‐comedor, que cuenta con una moderna chimenea, la cocina, una despensa, el lavadero, un aseo y un amplio garaje.
