Inventos, Ideas que Cambian Vidas. Una exposición de Obra Social ‘la Caixa’ sobre el diseño más solidario.

Desde el pasado 8 de octubre y hasta el 23 de febrero del próximo año, el espacio del CaixaForum en Barcelona alberga la exposición Inventos, Ideas que Cambian Vidas promovida por el Área Internacional de Obra Social “la Caixa” y comisariada por José María Medina, director de Prosalus y expresidente de la Coordinadora de ONG de Desarrollo. Después de este período se trasladará a sus homólogos en Palma de Mallorca y Madrid.

En ella se expone un recopilatorio de iniciativas sin ánimo de lucro con el fin de mejorar la calidad de vida de aquellos que más lo necesitan en las regiones más desfavorecidas. Además ofrece interactividad al visitante animándole a desarrollar su capacidad creativa haciéndole partícipe de la acción colaboradora.

La muestra seleccionada para la exposición aglutina algunos de los más destacados trabajos en las zonas de África, Asia y América Latina. Ingenieros, estudiantes, cooperantes y emprendedores de todo el mundo se ponen el mono de trabajo para dar con diseños viables enfocados hacia los 4.000 millones de personas que viven por debajo del umbral de pobreza. Cada proyecto expuesto viene acompañado de la historia de su invención y del relato de las dificultades que sufren los usuarios potenciales del artefacto y como éste puede ayudarles.

Todas las piezas tienen como denominador común la voluntad de solucionar necesidades del tipo más básico como el abastecimiento de agua o energía; de actuar sobre el segmento de población más vulnerable; de preservar el medio aportando soluciones sostenibles y de hacer una valoración coyuntural del entorno para que la propuesta sea lo más coherente posible con la realidad existente. A continuación, os mostramos algunos de los diseños presentes en la exposición.

Desgranar frutos, serrar, hacer la colada y muchos otros menesteres domésticos demandan energía para su desarrollo. Teniendo en cuenta que más 1.500 millones de personas no pueden acceder a dicha energía, el problema requiere una alternativa para dar cobertura a toda esta cantidad de personas. En ese sentido, la idea nace de cómo lograr esta energía con los mínimos medios y esfuerzos humanos. El resultado son las Bicimáquinas. Con una tecnología bien simple, éstas, aprovechan la fuerza del pedaleo para convertirla en energía canalizada hacia el funcionamiento de distintos mecanismos. De ese modo se ahorran grandes esfuerzos manuales a la vez que se usa un método de producción de energía totalmente limpio.

La precariedad de las construcciones de las barracas y su amontonamiento suelen producir grandes bloques compactos de viviendas que en muchos casos no disponen de más aberturas que un único acceso al interior del volumen. Así, la luz natural filtrada es mínima, requiriendo una iluminación mayor para poder desarrollar cualquier actividad en la casa. Para ello, la propuesta conocida como Botellas de luz solar, utiliza el agua y sus reflejos como difusor de la iluminación natural. Lo hace mediante la inserción de una botella de plástico transparente en el techo de la vivienda. La mitad superior de la botella recibe la luz solar y la canaliza hacia la parte inferior que proporcionará una iluminación equivalente a la de una bombilla de 50 vatios.

La obtención de agua se convierte en tarea costosa en la mayoría de zonas subdesarrolladas. Pocas fuentes de distribución y una logística nula para su transporte impiden abastecer con solvencia a los poblados próximos. El Transportador de agua Hippo Roller ofrece una buena solución para transportar hasta 90 litros en un solo viaje. En este caso, la operación se realiza a través de un barril cilíndrico que utiliza su eje longitudinal para anclar allí un mango que permite maniobrar y rotar con facilidad todo el contenedor.

Por supuesto, la educación y el acceso a la información también se ven seriamente dañados en estas zonas por la falta de infraestructura. La respuesta es la fabricación del Tambor digital, el cual se obtiene mediante la soldadura de dos bidones metálicos reciclados, que conforman un elemento con dos ordenadores portátiles con sus respectivos teclados resistentes al agua y unos paneles solares. Además de información elemental, los ordenadores ofrecen la posibilidad de conexión a Internet. Se prevee la futura instalación de 50.000 ejemplares en poblaciones de Uganda.

Otro de los artefactos destacados es la Silla de ruedas Mekong. El proyecto se ha llevado a cabo en Camboya, donde viven unas 70.000 personas con necesidad de usar silla de ruedas pero sin acceso a ella. Por ese motivo un equipo jesuita trabaja en su construcción como parte de un programa de reinserción sociolaboral para personas con alguna discapacidad. Se desarrolla con materiales locales de fácil acceso y su punto más destacado es la resistencia que le es proporcionada para la adaptación a los numerosos terrenos irregulares. Además su producción es personalizada tratándose de ajustar a la discapacidad concreta de cada usuario.

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