Si, nosotros también usamos cookies. Esas cosas con nombre de "galletita" que ayudan a que tu navegación sea más personalizada. Cierra este mensaje y nos darás tu permiso para seguir utilizándolas. Y seguirás disfrutando de diarioDESIGN como siempre.

Feliz viaje por nuestra web Cerrar
Gracia Cardona
27 febrero 2012

Tándem creativo: CuldeSac y Valentine nos explican su colaboración exitosa durante más de 6 años.

Hoy nos encontramos con Alberto Martínez, co-fundador de  CuldeSac, y Fernando Mainguyague, director de relaciones externas de la compañía de pinturas Barnices Valentine. CuldeSac es uno de los más reconocidos estudios de diseño españoles, con gran proyección internacional, y ha sido el creador durante los últimos años de los espacios Valentine en CasaDecor.

Último espacio, en CasaDecor Barcelona 2011

Unos espacios conceptuales que han conseguido durante este tiempo convertirse en un referente en el mundo del interiorismo: renovando sus ideas creativas de año en año para mostrar la nueva carta de tendencias Valentine, han conseguido atraer a profesionales y particulares a su terreno. El color Valentine se ha mostrado para el espectador no como el producto técnico que es, sino como un mundo de sensaciones y evocaciones que no han dejado en ninguna ocasión de sorprender.

El último espacio Valentine que pudimos ver, en CasaDecor Barcelona 2011, tenía unos protagonistas muy especiales: pinceles, brochas y rodillos contaban la leyenda de su evolución natural. Expresados como mutaciones imposibles, recreaban un árbol genealógico fantástico; la historia de la pintura Valentine, escrita desde una óptica divertida e inusual. Puedes leer sobre el último espacio Valentine en CasaDecor Barcelona aquí.

Veamos cómo nos explican el funcionamiento de este tándem creativo CuldeSac-Valentine, formado por una marca industrial y un estudio “de diseño emocional”.

A grandes rasgos, ¿Cómo y cuando se inició vuestra colaboración? ¿Quién buscó a quién?

Fernando: Nuestra relación comenzó por casualidad, nos conocimos en un CasaDecor Valencia e intercambiando opiniones se produjo el “flechazo”. Como cliente, vi que en CuldeSac entendían mis necesidades y lo que quería transmitir sobre la marca Valentine. Y comprendí que sabían cómo hacerlo.

El proyecto se inició en el mismo CasaDecor Valencia, con un concepto muy vanguardista, difícil de vender a un mercado conservador. Pero desde el principio quisimos crear un referente de novedad.

Art Gallery

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Art Gallery

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

¿Qué aporta Valentine a CuldeSac? Y a la inversa, ¿qué aporta CuldeSac a Valentine?

Fernando: Valentine quiere posicionar su marca como de alta gama, y asociarla al mundo del diseño. Para ello la propia “marca” CuldeSac ha sido esencial. En cada espacio que hemos desarrollado conjuntamente, los diseñadores jóvenes han tomado Valentine como la marca de pintura de referencia, tal y como lo hacen con el estudio de CuldeSac. Esta es nuestra apuesta de futuro.

Alberto: Para CuldeSac, después de 6 años de colaboración, Valentine es nuestro examen de creatividad. Nos pone en jaque cada vez con la misma cuestión, 2 veces al año; es un ejercicio continuo de imaginación.

 


La colaboración de ambas marcas con CasaDecor consigue elevar la pintura, algo material y práctico, muy prosaico, a un terreno de experiencias, sensaciones, sorpresas… para el espectador. ¿Cómo se consigue?

Alberto: Crear proyectos emocionales para una empresa con un producto industrial como la pintura es realmente difícil. Conseguimos la emoción gracias a la creación de una sensación espacial. Buscamos crear recuerdo en cada uno de los escenarios, llegar a emocionar con pequeños guiños que ayuden a explicar las tendencias de la pintura.

Fernando: Alberto siempre dice “no hay proyectos aburridos, sino clientes aburridos”. En CasaDecor buscamos explicar la pintura de una forma creativa, relacionándola con todos los sentidos: olfato, gusto, oído… CuldeSac ha descodificado este concepto a lo largo de los años y lo ha aplicado en las distintas intervenciones de CasaDecor de una forma tridimensional. El éxito es la repercusión que siempre han tenido nuestros espacios Valentine, y la expectación que creamos edición tras edición para los visitantes y los medios.

Alberto: Fernando ha tenido siempre el proyecto muy claro y así lo ha expresado siempre. Los objetivos han sido claros: aumentar el valor añadido de la marca y conseguir llevar a la gente de la calle la tecnología del producto. Ya somos un clásico en CasaDecor: ¿Qué hará Valentine en la próxima edición? ¿Cómo nos enseñará las tendencias del color de una forma diferente?

Searching for beauty. El oído

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Searching for beauty. El oído

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

¿Cómo aborda CuldeSac cada espacio? ¿Trabajáis a partir de un briefing?

Fernando: cada colaboración es un diálogo. Cada año nos sentamos y trabajamos en formato brainstorming, no partimos de briefing concreto. Mi objetivo como marca no es sólo recibir ideas sino también aportar. Y al final del proceso creativo, decidir si la idea va a ser comprendida por el público. No compramos una idea sin más. Nos implicamos tanto en la concepción de la misma como en la producción del proyecto.

Alberto: Pero no sólo la idea es importante, también lo es el contenedor, el espacio. Fernando escoge un buen espacio en CasaDecor, con unas características determinadas de tamaño, luz y forma. Todo se tiene en cuenta, incluso el suelo. Se busca un buen lienzo donde aplicar las pinceladas.

Valentine Delux

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Valentine Delux

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

¿Todos los espacios han sido blancos?

Fernando: No, el color del espacio se condiciona a la instalación. A veces, en algunos más teatrales, se han usado colores más radicales. Pero es cierto que el color es una cualidad de la pintura, no podemos escoger uno preferente. El cliente es quien debe escoger. Y el blanco es la suma de todos los colores. Por ello es más fácil usarlo para mostrar una carta de colores, y que el cliente escoja con subjetividad.

Alberto: Es cierto que el blanco es el color comodín, pero no es obligatorio.

¿Con qué espacio/experiencia estás más satisfechos?

Fernando: ¡Siempre el último, claro!

Alberto: Realmente el proyecto de las soperas de mesa fue un gran proyecto, muy complejo en su realización y control. Pero es uno de los que guardamos mejor recuerdo. Se repitió en dos CasaDecor, Valencia y Barcelona, mejorándose en la segunda edición.

A dinner I'd like to go to. El gusto

Pero el último ha sido sin duda muy relajante, muy entretenido. Es un proyecto de diseño industrial, con un toque cómico.

¿Creéis que se ha entendido bien?

Fernando: el proyecto de creación ha sido complejo, pero estamos muy satisfechos del resultado. Incluso el público nos ha querido comprar las piezas. En especial los cuadritos, que se han convertido ya en objetos codiciados. Tenemos la intención de itinerarlo, sería injusto limitar su exposición a un mes. Incluso tal vez puede llegar a crecer, se podría hacer un remake con las piezas, por ejemplo…

 


Miradas que juzgan: Frente a estas experiencias, ¿habéis notado si es diferente el feed-back de los profesionales del diseño de los que no lo son?

Fernando: el impacto es exactamente el mismo, la sorpresa. Pero una persona particular que viene de la calle buscando inspiración para su casa, al final mirará la carta de colores. El profesional analiza más el concepto y los estudiantes buscan la referencia, el espectáculo. La prensa busca que el espacio sea novedoso, fotogénico, con expresión. A cada uno le damos lo que viene a buscar.

 

Juntos habéis demostrado que la pintura/el color está presente en nuestras vidas de formas muy insospechadas: en una joya, en un plato de sopa, en una esencia de perfume, en pinceles imposibles… ¿Qué será lo próximo? ¿Con cuanto tiempo ideáis un proyecto?

Fernando: Ya lo estamos pensando, pero tal vez lo cambiamos. El factor sorpresa siempre está ahí. Empezamos las primeras conversaciones 6 meses antes. En cuanto hay un proyecto en marcha, ya pensamos en el siguiente.

Y por último, ¿qué factores diferencian y posicionan a Valentine como referente en el mundo de las tendencias en color?

Fernando: Nos queremos diferenciar de la competencia entendiendo las necesidades de cada target de consumidores y ofreciéndole las herramientas adecuadas para aplicar nuestro producto: ofrecemos asesoramiento tanto en tecnología como en color. Y lo hacemos tanto para arquitectos, como para interioristas, particulares, o pintores profesionales.

O sea, que ofrecemos mucho más que color. Las tendencias Valentine se elaboran durante un año, es un picking de colores según el estilo de vida, pero es tan sólo una sugerencia. Luego ofrecemos técnicas sobre cómo combinar y escoger los colores: tenemos un simulador de color en nuestra página web. También tenemos otras herramientas para arquitectos y prescriptores, que a veces no conocen exactamente la parte técnica del producto que están prescribiendo. Y para ello también les ofrecemos asesoramiento. Cuantas más herramientas ofrezcamos a los clientes, más fácil es que éstos se fidelicen.

Alberto: La verdad es que en Valentine la búsqueda de estas herramientas para los profesionales y los consumidores es una lucha constante. La pintura es un producto técnicamente difícil, se puede asimilar a la cosmética. Pintar es como aplicar cosmética sobre la piel, cada superficie es como una piel distinta, hay que saber si quiero reparar, proteger… Al final llega el color, pero antes hay mucho más.

Artículos relacionados

El FAD se transforma en federación con el 98% de los votos

Silla Zig-Zag: gravedad, geometría y diseño en un icono de la modernidad

Kazuyo Sejima: la elegancia transparente que logra crear espacios fluidos

De la silla Cesca a la mesa Noguchi: siete muebles que son iconos del diseño