Sutil rehabilitación minimal de la Linda Pace Foundation: de simple taller a galería de arte.
Poteet Architects se encontraron con una estructura original muy simple y un presupuesto limitado, que no debían ser ningún obstáculo para la proyección internacional de la entidad ni de sus responsables. Además, tratándose de una fundación dedicada al arte, el diseño de los interiores y la estructura debían estar acordes con la finalidad.
Poteet Architects consiguieron un resultado muy rico tanto en la forma como en la función de los espacios: el edificio alberga oficinas y salas de conferencias para la fundación y espacio para las colecciones temporales, así como para la colección permanente centrada en la vida y la influencia que supuso la fundadora de la entidad, artista, coleccionista de arte y filántropa.
La estructura simple del edificio existente se ha enmascarado con obras de arte tanto en el interior como en el exterior. Así, el edificio se ha concebido como un parque urbano, donde la fachada forma una base neutra para un jardín vertical. En contraste, la fachada que da a la calle se ha planificado a modo de pizarra con diferentes textos que tienen como objetivo sorprender a los transeúntes.
En su interior, los espacios abiertos y acristalados adquieren movimiento gracias a la abertura de claraboyas que permiten la entrada de luz natural a todos los rincones.
Las paredes más altas albergan las piezas más grandes de la colección sumergiendo el espacio de trabajo en el arte. La sala de conferencias, a la que se accede a través de una de las puertas-escultura, está iluminada por luz natural y, de noche, actúa de linterna para el jardín.
El proyecto, señala el equipo de Poteet Architects, “ilustra la riqueza inherente a la reutilización y a la adaptación de cualquier estructura, por muy modesta que sea”.