BIG y WeWork reimaginan la educación en Nueva York.
Con 930 metros cuadrados, WeGrow es un «Universo de aprendizaje» destinado a niños de entre tres y nueve años. Situada en el barrio neoyorquino de Chelsea en Manhattan, la escuela apuesta por la educación del niño a través de la introspección, la exploración y el descubrimiento.
«WeGrow ha sido creado para liberar el potencial creativo de todas las generaciones a través del diseño», señala Bjarke Ingels. El Socio Fundador y Director Creativo de BIG destaca cómo esta primera escuela de WeWork quiere facilitar el enfoque transformador de aprendizaje de WeGrow. «Los niños son más libres cuando el espacio es menos prescriptivo y más intuitivo. No tenemos que decirles cómo usar el espacio, y cada interpretación que hacen de él es buena», añade.
El poder transformador del aprendizaje
WeGrow está diseñado para convertir el aprendizaje en una experiencia transformadora y holística. Un campo de objetos «superelípticos» con gran variedad de funciones permite a los niños moverse libremente. De esta forma aprenden interactuando entre ellos y con el entorno.
Espacios transparentes y comunitarios fomentan la colaboración. Ocupando más de la mitad de la superficie de la escuela, comprenden cuatro aulas, talleres flexibles, un espacio comunitario, estudios de usos múltiples y de arte, sala de música y otros escenarios de juegos.
«WeGrow está comprometido a elevar la conciencia colectiva del mundo», apunta Rebekah Neumann. Para la fundadora y directora general de WeGrow «todos somos estudiantes de la vida para la vida, y nuestro propósito es estar en un estado constante de crecimiento personal».
La reducida altura de las particiones que dividen los espacios, diseñadas para los más pequeños, permiten que la luz natural llegue a lo más profundo del edificio. Tres niveles de estanterías curvas albergan actividades para cada grupo de edad. Además de aportar una sensación de comodidad, seguridad y comunidad, ofrecen a los maestros una perspectiva completa del espacio en todo momento. Sobre ellas, las nubes acústicas de fieltro reflejan distintos patrones de la naturaleza. Iluminados con bombillas Ketra, cambian de color e intensidad según la hora del día.
Cada estación de aprendizaje incluye muebles con detalles y materiales cuidadosamente diseñados por BIG para optimizar el entorno educativo. Las aulas modulares promueven el movimiento y la colaboración, y las mesas y sillas de rompecabezas de Bednark Studio se fabrican en distintos tamaños para ofrecer perspectivas iguales. El jardín vertical de azulejos de la firma suiza Laufen son pequeños bolsillos con lavanda, violetas y menta en su interior.
La naturaleza como inspiración
WeWork toma prestadas las cualidades de la naturaleza para crear un ambiente tranquilo que potencie el estudio. Las estanterías en forma de hongos, el prado de guijarros y las colmenas de lectura recrean un entorno de aprendizaje orgánico. Padres y profesores comparten el vestíbulo con los niños, que funciona como área de trabajo, reunión o espera.
Para iluminar el espacio se han utilizado Gople Lamp y Alphabet of Light, diseñados por BIG Ideas fabricados por Artemide. Ambos sistemas ofrecen una iluminación natural durante toda la jornada escolar.
Fotografía: Dave Burk y Laurian Ghinito