Alojarse en cabañas en plena costa gallega.
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Sobre una parcela delimitada por un camino de tierra en la parte más elevada, y por un seto vegetal y muros de piedra en el encuentro con el sendero que discurre por la zona más baja, el proyecto apuesta por la conservación y puesta en valor de las preexistencias. Un profundo respeto por el entorno, que los arquitectos han materializado a través de cuatro volúmenes independientes y elevados sobre el suelo.
Condicionados por la topografía, vegetación, muros y caminos de la parcela, y respetando la pendiente natural del terreno, los apartamentos se sitúan escalonados, comunicados por un entramado de pasarelas que les da acceso. «Se garantiza así la privacidad de cada uno de ellos sin renunciar a la impresionante perspectiva de la ría de Muros-Noia» señalan sus autores, que han creado cuatro unidades autóctonas que al mismo tiempo permanecen interrelacionadas.
Para su construcción, Salgado e Liñares arquitectos ha contado con la colaboración de ADDOMO, junto al cual ha llevado a cabo un elaborado sistema constructivo de madera que logra optimizar costes y tiempo de montaje. La cercanía de la ría y la presencia de bateas en la misma ha hecho que se haya optado por el reciclaje de algunos de los materiales utilizados en ellas, como los entramados de las vigas, empleados en los acabados interiores y exteriores de las cabañas, así como en ciertos elementos estructurales.
Además, y para potenciar aún más la integración-mimetización de los apartamentos con el entorno natural, se han plantado árboles autóctonos de grandes dimensiones, que acabarán camuflando las edificaciones entre sus ramas y fundiéndolas con la propia naturaleza.
Fotografía: Héctor Santos-Díez
Cabañas de Broña
cabanitasdelbosque.com