Loft Kolasiński: una reforma en Polonia con sorpresa española.
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Al igual que en otros proyectos de este estudio de interiorismo y diseño, han tratado de preservar el carácter original del espacio, conservado y restaurado elementos originales como los pavimentos de madera y todos los revestimientos de estuco.
Con el mismo fin se han incluido elementos decorativos de los años 30 y 50 procedentes de Polonia, República Checa, Italia, Francia o Dinamarca, ya que Loft Kolasiński también está especializado en la búsqueda y en la adquisición de piezas excepcionales de mobiliario, iluminación, cerámica, grabados y alfombras de época.
En muchos casos colaboran con artesanos especializados para recuperar piezas que proporcionarán a los espacios un sello único.
En contraste con el lienzo blanco de las paredes, en la sala de estar adquieren singular protagonismo, la alfombra de tonos rojos y estampado geométrico diseñada en los años 60 por Antonin Kybal, y las piezas de madera de los años 50 de Grete Jalka y Raymond Théophile Halas.
En el dormitorio, se combinan piezas recuperadas, como el sillón -creación de Pierre Guariche en los años 50- con otras diseñadas a medida por el propio estudio, como la cama realizada en madera de roble acabada con aceite.
Loft Kolasiński pone especial interés en el diseño de estas piezas de madera personalizadas, en las que colaboran con carpinteros tradicionales. Para su realización se utiliza madera maciza de alta calidad de especies de todo el mundo, lo que ofrece la posibilidad de transformar la pieza en el futuro para adaptarla a nuevos usos. Para los acabados se suele optar por laca o aceite, aplicados manualmente. Igualmente, el estudio posee su propia línea de mobiliario: Public project y también realizan diseños únicos de alfombras, que se tejen a mano en Nepal.
Al igual que en la sala de estar y en otras estancias de la casa, se ha recurrido también al color rojo para aportar una pincelada de dinamismo y vitalidad. Un cartel de la película Matador (dirigida por el cineasta español Pedro Almodóvar en 1986) ofrece el contrapunto perfecto a los sobrios acabados de los revestimientos y elementos decorativos.
Este equilibrio entre piezas recuperadas y diseñadas a medida tiene continuidad en el resto de habitaciones de la casa, como el hall de entrada, la cocina o el baño.
Fotografías: © Karolina Bak
