Rehabilitación total: la caza de un tesoro a través de los siglos.
Porque antes de ser el Hôtel Dupanloup, fue la casa de un Obispo en el siglo diecisiete. Estamos hablando pues de un edificio de arquitectura neoclásica llena de piezas que han sobrevivido a lo largo del tiempo.
¿Puede servir, por tanto, un lugar de estas características en un espacio contemporáneo de estudio? Sí, según la Comisión Nacional de Arte de Francia, quien le otorgo el proceso de transformación al estudio neerlandés Makkink & Bey.
El equipo ha aprobado con nota. Tras remodelar y decorar el espacio principal y veintitrés salas de estudio ha logrado un singular y original espacio, ecléctico y lleno de contrastes, en el que se llega a crear una confusión: ¿estamos ante un edificio moderno con decoración clásica es un edificio antiguo con una estética vanguardista?
Porque aquí el mármol de las paredes se junta con mobiliario inspirado en IKEA, y muebles geométricos llenan habitaciones con ornamentaciones florales de yeso. Y lo mejor es que todos hacen buena pareja.
Este rico contraste de contextos entre el pasado y el presente se ha conseguido con una combinación muy equilibrada pero en la que destacan ciertos elementos que definen el proyecto.
Nos referimos a las alfombras y las cortinas con ilustraciones artísticas procedente de los archivos del edificio así como el Museo de Bellas Artes de la ciudad, el Centro Frac y la Casa-Museo de Juana de Arco. Destacan las cortinas semitransparentes con los dibujos incluidos.
El mobiliario es el otro gran puntal del proyecto. Cuenta con piezas antiguas, mesas y sillas hechas en exclusiva para este proyecto (la serie Dupanloup) y, entre otros, butacas y asientos de PROOFF en nuevos colores.
Por último, lo más curioso: los rediseños de muebles de IKEA a cargo de los estudiantes de la École Supérieure d’Art et de design d’Orléans que participaron en un taller de verano con estudio neerlandés.
Fotografías: Hôtel Dupanloup, Studio Makkink & Bey, Ministère de la culture et de la communication / Drac Centre y François Lauginie.