Forma Arquitectura y un apartamento que calma el estrés de la vibrante de la ciudad
El estudio de arquitectura moderna ha desempeñado la transformación de una vivienda construida en 1900 con el objetivo de conservar los elementos arquitectónicos originales, a la vez que se mejoraba la comodidad y la eficiencia energética.
Una transformación enfocada en los detalles
Forma Arquitectura, especializado en la construcción moderna, ha llevado a cabo, mediante una reforma integral, el diseño de un apartamento construido en 1900 en pleno corazón del Eixample de Barcelona, caracterizado por el aprovechamiento de los espacios pequeños, de una estética minimalista, en los que predominan los tonos terrosos y de madera.
El principal reto del proyecto, antes de abordar el diseño del espacio, era conservar los elementos arquitectónicos originales del piso mientras se mejoraba la comodidad y la eficiencia energética. Sin embargo, tal y como ha señalado el estudio, “debido a las limitaciones de aislamiento de las construcciones de 1900, conservar los elementos originales podría parecer contraproducente”. De modo que, como solución, decidieron mantener la estructura original e inyectar una capa de aislamiento de celulosa entre la capa exterior y los materiales originales para garantizar un óptimo aislamiento.
Efecto de comodidad que conforman los materiales
Forma Arquitectura quiso diseñar el proyecto como un refugio para los inquilinos de la vivienda, que destaca por su comodidad. “Los espacios deben tener personalidad, pero sin resultar pesados al pasar muchas horas”, según ha señalado el estudio. En este caso, la madera es la protagonista en suelos y carpintería: en el suelo, se llevó a cabo una combinación de parquet y suelo hidráulico que aportaba autenticidad y calidez en una misma estancia.
El verde en el mobiliario de la cocina y el almacenamiento se introdujo estratégicamente junto a las baldosas hidráulicas otorgando personalidad al núcleo del piso. Por otro lado, los muebles a medida desempeñaron un papel crucial para maximizar el espacio. En este caso, la mesa polifacética sirve como isla de cocina, mesa de comedor y área de trabajo, adaptándose a diferentes necesidades.
Luminosidad y grifos, productos de marcas referentes
Por otro lado, para mantener el estilo sencillo, pero sin sobrecargar los espacios de la vivienda, el estudio de arquitectura optó por productos de marcas reconocidas en el sector del diseño como Santa&Cole, Faro, Blanco y Tres. En el caso de Santa&Cole, Forma Arquitectura ha empleado como elemento decorativo la lámpara de suspensión M68 en negro mate con aluminio pulido, así como la pequeña lámpara Cesta creada por el diseñador Miguel Milá.
En la misma línea de la luminosidad, el listado lo completaron el producto Stan de Faro, un proyector de carril blanco pensado para espacios donde es necesario incorporar un punto de luz; el grifo Lanora de acero inoxidable diseñado por Blanco para la cocina; y el Study grifo monomando empotrado para lavabo de Tres Grifería.
El resultado final es un espacio eficiente y cómodo en el que se han mantenido los elementos arquitectónicos originales. “La combinación de estos productos con la madera, el verde y los tonos terrosos creó una atmósfera cálida, personal y auténtica, que calma el estrés vibrante de la ciudad”, según ha concluido Forma Arquitectura.