CM4 Arquitectos reforma un hotel boutique con vistas a la catedral de Cádiz
El estudio de arquitectura e interiorismo de Sevilla ha impulsado un estilo atemporal que encuentra su mayor expresión en los claroscuros de las zonas comunes o en la luminosidad de sus catorce habitaciones.
Remanso de paz
CM4 Arquitectos, el estudio de arquitectura e interiorismo de Sevilla, ha realizado una reforma integral en un antiguo hotel de Cádiz para transformarlo en el nuevo Hotel Olom, propiedad del grupo hotelero mexicano Origen. El edificio suma cuatro plantas más azotea con terraza y piscina infinita.
El edificio se encuentra en una zona bulliciosa, llena de turistas, por lo que CM4 buscó crear un auténtico remanso de paz para el huésped. “Al tratarse de un lugar sumergido dentro de la ciudad, no era necesario que el diseño guardara relación con el entorno, ya que solo abrir la ventana se divisa la imponente Catedral de Cádiz”, según señala CM4 Arquitectos en el comunicado que define su proyecto.
Con un estilo atemporal y no sujeto a modas, destacan distintos espacios, como los claroscuros y una teatralidad acogedora y misteriosa de sus zonas comunes; o su restaurante Ettu, de ambiente local y natural. También sobresale la luminosidad de sus catorce habitaciones y su terraza con espectaculares vistas a la catedral.
“En el interior las zonas comunes son tenues, acogedoras y silenciosas, donde el papel de los materiales y la luz es fundamental”, según explica CM4 Arquitectos. En el lobby, unas tupidas cortinas granates, teatralmente iluminadas de techo a suelo, crean un interesante juego de luces y sombras. Este rojo intenso se repite en los tapizados de los sofás envolventes, diseñados a medida por el propio estudio, que contrastan con el negro de paredes y suelo, así como con la tonalidad natural de los revestimientos de madera alistonada.
Respecto al restaurante, CM4 ha apostado por diseñarlo con un estilo muy natural y acogedor, donde el interiorismo contextualiza su propuesta culinaria, que apuesta por el producto de cercanía. Las sillas nórdicas, las paredes con distintas estanterías retroiluminadas de madera, las cortinas en tonos crudo o verde, las plantas en algunos rincones y los grandes ventanales que se abren a una terraza permiten disfrutar tanto de la gastronomía como del clima apacible gaditano durante casi todos los meses del año.
En las habitaciones, la importancia recae en el juego entre funcionalidad y diseño atemporal, espacios sutilmente iluminados envueltos en tejidos suaves y maderas naturales. Se ha buscado generar un ambiente neutro, de líneas rectas, paredes blancas, detalles en negro y revestimientos y suelo de roble.
“La zona más instagrameable, su azotea”, según destaca CM4 Arquitectos. Con bar y piscina, regalan las majestuosas vistas a la Catedral de Cádiz y se centra en contemplarlas lo más cómodo posible con mobiliario cómodo y diseños de líneas sencillas.
Bajo el lema Otra manera de hacer arquitectura, el estudio encargado de la reforma del hotel realiza proyectos de viviendas, hostelería y retail con un estilo fresco y original. Actualmente cuenta con una media de cincuenta proyectos activos, con un acumulado de cuatrocientos proyectos realizados en toda España.