Diseños de Gaudí y Dalí comulgan en este piso ecléctico y sofisticado diseñado por Alex March.
La pasión por el arte de la propietaria llevó al estudio de Alex March a realizar el diseño de esta vivienda de 260m2 en la zona del Turó Park (Barcelona). Se ha realizado un riguroso estudio sobre el color para poder dar vida a todas las estancias, además de piezas de diseño nacionales e internacionales que le otorgan carácter distintivo a la vivienda.
Una vivienda con la pasión por el arte y el diseño como bandera
Alex March Studio se embarca otra vez en pisos atrevidos. El interiorista catalán ha firmado un nuevo diseño Barcelona bajo la mirada exigente de una clienta apasionada por el arte, el diseño y los estilos mediterráneo y africano. El resultado es un piso exclusivo de 260 m2 en la zona de Turó Park.
“Mi cliente deseaba tener otra relación con su espacio, transformarlo en un hogar inspirador, atemporal, elegante, alegre, equilibrado, con alma y carácter”, explica Alex March. La propietaria de la vivienda es una aficionada al arte y en particular a las obras de Iñaki Moreno. Una de las prioridades de este proyecto en Barcelona fue preservar, recuperar y rejuvenecer los elementos preexistentes de la vivienda.
El piso diseñado por Alex March respiraba claras influencias mediterráneas. Ubicada en una finca de los años 20, la vivienda es una mezcla de carácter europeo muy vivo y cálido con mezclas étnicas, principalmente africanas. Un asiduo estudio y análisis del color dieron forma al diseño de esta vivienda de Alex March, quien se caracteriza por este tipo de trabajos.
La mezcla de estilos y épocas también es habitual del interiorista catalán, por lo que el proyecto de este piso en Turó Park fue idóneo. Para esta vivienda se escogieron elementos de mobiliario y decoración diversos, donde confluyen el arte figurativo, el surrealismo y el expresionismo con la abstracción del arte y la artesanía.
Piezas de decoración únicas de Dalí o Gaudí cobran vida en la vivienda
En el piso se han colocado productos de artistas desconocidos a día de hoy, así como también de autor icónicos de Cataluña, España y artistas europeos icónicos del siglo XX. Omar Shezard de Omalight es el diseñador de varias lámparas que se encuentran en la vivienda.
Por otra parte, los cuadros son obra del artista contemporáneo Iñaki Moreno, mientras que las alfombras son de lana iraní de la marca Turkestán. Alex March también ha optado por incluir diseño biofílico a la casa, con plantas de Casa Protea.
La pieza estrella del salón (y de casi toda la vivienda) es una gran mesa/escultura Leda, diseñada nada más ni nada menos que por Salvador Dalí. Se trata de una mesa de centro dorada de latón cuyo sostén es una escultura de mano y pierna con zapato de tacón sobre la que destaca un huevo en mármol de Carrara. La mesa está inspirada en el diseño del cuadro “Femme à tête de roses” firmado por Dalí en 1925.
La mesa auxiliar blanca junto al sofá fue diseñada por Alex March, mientras que la lámpara que sobre ella se apoya pertenece a la serie Bach, diseñada en 1970 por la pareja de arquitectos Federico Correa y Alfonso Milá. Del lado opuesto del salón se ubicó un Cabinet diseñado por la interiorista, arquitecta y diseñadora francesa Charlotte Perriand en 1958. Pata darle protagonismo a esta pieza, Alex March colocó únicamente dos piezas decorativas: un cuadro del artista italiano Piero Fornasetti y una escultura de Julio Bono.
Un comedor estilo ecléctico con homenajes al modernismo catalán
Así como sucede en el salón, la luz natural también baña todo el comedor. Para esta estancia de la vivienda, Alex March eligió a las paredes en crudo como punto de partida, en combinación con el suelo de madera maciza de roble. El bancó Batlló, diseñado por Antoni Gaudí, acapara todas las miradas del comedor, funcionando como un majestuoso hilo conductor con el salón. La mesa de comedor es de madera natural y diseñada por Jordi Vilanova en los sesenta que contrasta con las sillas blancas Houdini. Tres jarrones de gres bañados en oro 24 quilates y platino decoran la mesa.
Viaje entre el Mediterráneo y África en la zona de noche
En contraste con el resto de las salas, el dormitorio es un refugio de calma y equilibrio. La gama cromática por que la ha apostado Alex March para esta vivienda varía entre las tonalidades crudas y marrones de la madera natural.
La decoración representa una clara influencia africana en la vivienda. Una lámpara de madera Pahre de pie, de Omalight y una escultura de José Berlanga (1981) rematan la habitación principal. Un taburete de madera maciza de los años 50 y una butaca de Charlotte Perriand Bauche 1946 aportan el toque rústico a la estancia.
Fotografía: Daniel Schäfer
Estilismo: Erika G. Lee