Minimalista, luminosa y con espacio exterior: radiografía de la casa “ideal” de la generación Z.
"Deseos muy ambiciosos que chocan con la realidad". Según un estudio elaborado por el Instituto Silestone, las pretensiones y deseos de los jóvenes no coinciden con las ofertas y oportunidades del mercado de vivienda, donde cada vez cobran más relevancia las viviendas sociales y el coliving como alternativa a los pisos de alquiler.
La vivienda del futuro de la generación Z
¿Qué anhelan los jóvenes a la hora de imaginar su propia vivienda? Este fue el gran interrogante que se planteó el Instituto Silestone para la publicación del informe de la vivienda del futuro de la Generación Z en España. De acuerdo con el estudio, las pretensiones de este segmento de la sociedad no están acordes a las ofertas del mercado inmobiliario actual.
El informe revela que los centennials (aquellos nacidos entre 1995 y 2010) quieren en el futuro una casa propia, tradicional, con zonas comunes y privadas separadas y tenga un espacio exterior para disfrutar al aire libre.
El 32,5% de los encuestados por el Instituto Silestone anhela contar con un espacio exterior, mientras que el 29% imaginó un piso como su vivienda ideal en el futuro.
De acuerdo con el informe, el 75,4% de los encuestados imagina poder comprar una vivienda, mientras que sólo el 18,9% apuesta por el alquiler. Sin embargo, este deseo de la generación Z contrasta con la falta de oferta de una vivienda asequible y el aumento de precios de inmuebles.
Según los expertos que han participado en el informe, el coliving y la vivienda social tendrán gran protagonismo en el futuro. Miguel Ángel Almodóvar, sociólogo y periodista, indica que es necesario fomentar políticas públicas para aumentar la oferta de viviendas asequibles. Según Marisa Santamaría, investigadora de tendencias de diseño, “la vivienda social será muy importante en el futuro, se crearán nuevos espacios compartidos con actividades comunes y cooperativas. El futuro pasa por un coliving progresivo”.
Una división tradicional de las viviendas
El confinamiento y la pandemia han puesto en tela de juicio las maneras de habitar, cómo se configuran los espacios y cómo adaptarlos a las necesidades personales y profesionales. En este sentido, el 63,4% de los encuestados se decantan por una vivienda con una clara delimitación entre zonas comunes y habitaciones.
“La jerarquización de las estancias impide que nuevas estructuras familiares puedan habitar cómodamente sus viviendas. Por ello, las viviendas que ofrezcan ambientes polivalentes podrán adaptarse mejor al intercambio de sus habitantes y al paso de los años”, declara para el Instituto Silestone la arquitecta Marta Benedicto, de Cierto Estudio.
Un 28,6% de los encuestados optan por un hogar ambientes polivalentes, mientras que un 7,5% eligen una vivienda tipo loft o estudio. De hecho, los jóvenes de la Generación Z que se sienten más atraídos por este último tipo de vivienda son también los que más se identifican con inmuebles de alquiler, según rescata el informe.
Luminosa, confortable y (si puede ser) sostenible
En cuanto al estilo y diseño que imagina la generación Z en sus casas, el 41,4% de los jóvenes eligen un estilo minimalista, sin demasiados accesorios ni colores estridentes. Por el contrario, el 15% de los encuestados prefiere un estilo tradicional, un 13% rústico y un 7,7% industrial.
La luminosidad figura como la opción más citada entre las respuestas sobre los elementos a los que más importancia le darán en sus viviendas los jóvenes. El confort y la limpieza son otros de los deseos de los centennials al imaginarse su casa ideal. Estos datos coinciden con el anhelo de los jóvenes de contar con espacios exteriores y de disfrute al aire libre.
La sostenibilidad es un factor prioritario en la vivienda del futuro para siete de cada diez jóvenes de la generación Z. Sin embargo, los expertos coinciden en incorporar el factor económico como elemento clave para que tenga un impacto real en los hogares.
