The Plastic Museum: la segunda vida al plástico sí es posible.
DelaVegaCanoLasso son los autores de The Plastic Museum. Un museo efímero que nace con el objetivo de concienciar sobre el rol vital que los plásticos juegan en nuestro día a día. Una reflexión sobre sus infinitas posibilidades a través de prácticas responsables, concienciación medioambiental y cultura de la reutilización y el reciclaje.
Entre el 8 y el 16 de mayo, la Plaza de Juan Goytisolo contigua al Museo Reina Sofía ha sido colonizada por una construcción prefabricada con plástico reciclable. Fabricada a partir de piezas cortadas y numeradas con control numérico para permitir su montaje en tan sólo dos días y desmontaje en uno, el día 17, Día Mundial del Reciclaje, será desmontada para permitir el reciclaje y reutilización de todas sus piezas.
Arquitectura ‘plástica’
Construido íntegramente en plástico para Shackleton / EsPlásticos, la plataforma que aúna a los diferentes agentes que forman parte del sector, el proyecto de delaVegaCanolasso apuesta por una estética que se aleja de la imagen típica de las instalaciones efímeras a las que estamos acostumbrados. De apariencia arquitectónica, en él conviven distintos tipos de plástico como el polietileno, el metacrilato, el policarbonato y el PVC. Todos ellos elegidos por su capacidad para ser reciclados, su comportamiento estructural o su transparencia.
Desde la plaza, el museo se lee como un volumen puro, con una piel opaca y traslúcida que se ve interrumpida por costillas de metacrilato de distintas opacidades. Estas reflejan y transmiten la luz interior, permitiendo a los viandantes intuir un universo que les invita a entrar.
Costillas estructurales de metacrilato
La combinación material de distintos plásticos permite cambiar las reglas de juego y construir una estructura ‘invisible’ que sustenta todo el edificio. Un gran mecano con siete pórticos estructurales de metacrilato transparente de 20mm compuestos por vigas y pilares en U de gran canto.
El resto del volumen se reviste con una piel autoportante de polietileno blanco, mecanizado y machihembrado. Denso, este material cambia de apariencia a lo largo del día según la inclinación solar, transformando el edificio en una linterna por la noche. Para la cubierta, y aprovechando la ligereza y aislamiento de este material, se opta por policarbonato multicelular blanco.
Una invitación a la reflexión
Diseñada por el comisario Eloy Martínez de la Pera y distribuida en tres salas, la exposición se muestra como un espacio transformador que invita a los visitantes a reflexionar sobre el uso y gestión de los plásticos. Materiales que han transformado sectores como la sanidad, la alimentación, la construcción o la movilidad, muchas veces objeto de una percepción incorrecta, de los que el museo quiere transformar su mal uso.
Fotografías: Imagen Subliminal (Miguel de Guzmán + Rocío Romero)