Barcelona y Brasil se encuentran en un edificio muy Bauhaus.
Bajo encargo de Squircle Capital, Marcio Kogan ha dotado a Francesc Macià 10 de una nueva imagen que responde con creces a las demandas de sus inquilinos. Un inmueble de 17.750 metros cuadrados, que los cofundadores y directores generales de la empresa propietaria, José Caireta y Daniel Castillo, han querido convertir en un icono de la cuidad.
Con 10 plantas de altura, el edificio alberga siete viviendas y un ático. Las primeras, ocupando la totalidad de las plantas 1ª a 7ª; y el ático en las dos siguientes. La planta baja se reserva para espacios e instalaciones comunes.
Situada en la tercera planta, la primera vivienda abierta al público ha sido diseñada conjuntamente por Marcio Kogan y José Caireta, de Squircle Capital. Con una superficie de 600 metros cuadrados, consta de cuatro dormitorios, cuatro baños, una cocina de 55 metros cuadrados y una sala de estar de 250 metros cuadrados.
Una vivienda volcada a la ciudad
Dentro, amplias ventanas de suelo a techo ofrecen impresionantes vistas sobre la plaza Francesc Macià y la ciudad de Barcelona. La madera de nogal que viste las paredes convive con lujosos materiales como el granito negro o los mármoles Carrara, Statuario y Negro Marquina. Todos ellos en una paleta dominada por el amarillo y el gris.
“Mi objetivo era brindar a los residentes potenciales de Francesc Macià 10 una experiencia de vida inolvidable. Ventanas de suelo a techo, que no dejen nada fuera de la vista, y materiales que aporten atemporalidad a los interiores y que complementen la vista de la ciudad», explica Marcio Kogan.
Experiencia de lujo
Diseñada para ofrecer una experiencia de lujo a sus habitantes, Francesc Macià 10 ofrece servicios propios de un hotel de cinco estrellas en un entorno residencial privado. Con dos entradas privadas que aseguran un acceso exclusivo y seguro, sus usuarios podrán tener acceso a una gran cantidad de servicios. Desde almacenamiento privado y estacionamiento para hasta seis automóviles y una motocicleta por residencia, a una piscina de 20 metros, un gimnasio, dos salas de tratamiento y una sauna con sala de vapor.
Con casi el 50% de las viviendas vendidas, el edificio atrae a compradores de todo el mundo. Ubicado en un emplazamiento inmejorable de Barcelona, ofrece además a sus usuarios la posibilidad de personalizar por completo su diseño.