MONOCHROME: la nueva casa del color en Brooklyn.
Una casa de siete habitaciones del barrio neoyorquino de Brooklyn (276 Greenpoint Ave) se ha convertido estos días en una interesante atracción para los amantes del arte y la decoración. Se trata del proyecto MONOCHROME, que como se intuye por su nombre centra su encanto principal en el uso del color.
El secreto de este espacio es que cada habitación es liderada por una tonalidad específica de la paleta Pantone y toda la decoración de la sala gira en torno a esta.
El espacio, una especie de almacén situado en la zona del Metropolitan Design Center, presenta siete habitaciones en total. Los colores elegidos para liderar cada sala han sido los del arco iris. Es decir, el rojo, el naranja, el amarillo, el verde, el azul, el púrpura y el rosa.
La inspiración para MONOCHROME nace de la idea de que la gente siempre compra arte para que coincida con el estilo de su hogar. Pero pocas veces lo hace al revés. En este proyecto se ha querido dar forma a una casa en la que las habitaciones coinciden con la obra de arte que las decora y no al contrario. El arte es el foco y todo debe construirse a su alrededor. ¿Cómo? A través del color.
Color con la firma de CJ Hendry
La responsable detrás de la colorida casa de Brooklyn es la artista australiana CJ Hendry, de treinta años, que estudió finanzas hasta que decidió dar el salto al mundo del arte. Es conocida por sus dibujos hiperrealistas, normalmente a lápiz y en blanco y negro. Sin embargo, en los últimos meses su obra ha tomado rumbo hacia una transformación casi radical. Ha abandonado el duotono, y ha empezado a jugar con paletas tonales más variadas.
Esto sucedió tras trabajar con el diseñador Christian Louboutin en una nueva colección de tacones con la suela arco iris. MONOCHROME supone para ella el introducirse al mundo del color de forma autónoma. Ha aceptado el reto con gusto, aunque asegura que aún se está acostumbrando a este cambio de tonalidades. “No tengo muy claro como funciona aún, pero el color es excitante a la vez que frustrante”, ha comentado.
El espacio se ha abierto al público del 5 al 8 de abril y centenares de curiosos se han acercado para poder pasear por sus distintas salas monocromáticas y conocer la casa de CJ Hendry de cerca. La casa resulta curiosa a la vista, y un escenario ideal para tomar fotografías. Brooklyn nos queda un poco lejos, pero por suerte podemos tener la sensación de haber estado a través de la huella que sus visitantes han dejado en Instagram estos días.