Una estética casi escandinava junto al Retiro madrileño.
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Los autores encontraron inicialmente un espacio muy transformado ya que la vivienda se usaba como oficina y se habían borrado todas las huellas de la arquitectura original, quedando sólo las carpinterías de la fachada protegida. Con este punto de partida se ha proyectado una vivienda contemporánea, con una distribución abierta para aprovechar al máximo la iluminación natural.
En la elección de los materiales -maderas nobles, escayola- se ha tratado de establecer un diálogo con la arquitectura original pero evitando crear falsas réplicas.
El diseño incorpora prestaciones de última generación, como la climatización a través de suelo radiante y la iluminación integral con LED. La atmósfera cálida y confortable se acentúa con la selección de mobiliario. Muebles clásicos de grandes maestros del movimiento moderno se combinan con otros actuales y diseños del propio estudio. En la zona de estar, las elegantes Saarinen Executive Arm Chair del comedor se combinan con butacas de Sancal, alfombras de Gan, mesitas de Stua, el comodísimo puf Zoe de Verzelloni …
El mismo criterio se ha seguido en los dormitorios, en los que han sido necesarios muy pocos elementos (muro cabecero revestido en madera, cama de Arlex, lámparas Scantling de Marset…) para conseguir un ambiente acogedor y funcional.
La cocina, realizada en DuPont™ Corian® blanco por Artificio, se configura alrededor de una isla central y destaca por su carácter abierto, estableciendo una continuidad con el resto de espacios de la vivienda.
El resto de las estancias se han acondicionado siguiendo el mismo planteamiento de la intervención arquitectónica: estableciendo un diálogo sosegado entre diferentes épocas, en el que la comodidad, los materiales naturales y el gusto por los buenos acabados, dan coherencia a todo el conjunto.
Fotografías: Adriana Merlo, cortesía de batavia.es