Kameha Grand Zúrich, de Marcel Wanders. Una nueva atracción en la ciudad.
Lógico, si tenemos en cuenta que el reconocido diseñador y director artístico afincado en Amsterdam está considerado una anomalía en el mundo del diseño. Siempre buscando excitar, provocar y polarizar, así como entretener al público con espacios llenos de pasión. Sitios donde los sueños, a veces, se hacen realidad, aunque para ello parta de ideas singulares, sencillas y hasta ingenuas.
“Otros ofrecen un diseño de interior, pero nosotros – ha dicho Wanders – proporcionamos un destino. Un hotel debería entretener, inspirar y estimular. Queremos que los huéspedes vivan una experiencia de estilo creando un lugar lleno de sorpresas y belleza”.
Lo cierto es que el Kameha Grand Zurich es un choque de diseño y estilo de vida, en el que la pasión por el detalle juega un importante papel en el concepto global de un proyecto que cuenta con varios espacios públicos y 245 habitaciones, once de ellas diseñadas con el sello más personal de Wanders.
Se trata de habitaciones temáticas de lo más variadas: la Princess Suite, la Diva, la Gentlemen, la Burlesque, la Poker Face, la Ghostwriter, la Fair Play, la Watchmaker, la Workout y la Serenity. Todos y cada uno de los elementos de decoración tienen que ver con el tema. La Poker, por ejemplo, tiene una ruleta y cartas de juego.
El conjunto del hotel también tiene un toque mágico e impredecible inspirado en Suiza. Por ejemplo, ¿con qué alimento solemos asociar al país helvético? Con chocolate, ¿no? Pues allá que va Wanders y llena los dormitorios con paredes que imitan tabletas de chocolate, sofás en forma de Toblerone y lámparas que homenajean las campanas que cuelgan de las vacas.
El restaurante italiano L’UNICO busca, por su parte, acercarse al ideario de las cocinas mediterráneas con toques fantasiosos como enormes platos colgando del revés en el techo. Mientras que el YU NIJYO está influenciado, obviamente, con los elementos más típicos de Asia.
Luego está el bar PURE GOLD, que como dice el nombre (oro puro) es un espacio monocromático con paredes simulando lingotes de oro acompañado de lujosos y elegantes complementos.
El hotel también cuenta con dos salones. Uno es el Smoking Lounge, con un aire de club clásico de ambiente íntimo y sillones de cuero. El otro es el Shisha Lounge, un homenaje a la cultura árabe.
Por último, los espacios dedicados a puntos de reunión como el Kameha Dome: setecientos metros cuadrados donde opulentos techos cubiertos de rojo contrastan con majestuosos suelos de azulejos blancos y negros al más puro estilo de un tablero de ajedrez.
Como veis, un recorrido casi que por los cinco continentes sin tintes de un interiorismo más industrializado. Pero lo más curioso es que esta poesía y viaje por diferentes épocas tiene un aire contemporáneo, algo que ha conseguido mezclando maderas cálidas y muebles hechos a mano, con lámparas icónicas y piezas proporcionadas por la firma Moooi, que cuenta con Wanders como líder de la marca.
Fotografías: Moooi
Kameha Grand Zürich Hotel
Dufaux-Strasse 1 / Corner Thurgauerstrasse
CH-8152 Glattpark
Zúrich