Boa Mistura captura la esencia del pueblo cubano en la XII Bienal de La Habana.
Más sobre este colectivo multidisciplinar en diarioDESIGN.
La XII Bienal de La Habana es esta vez el escenario de una propuesta que parte de la invitación del artista cubano Alexis Leyva, «Kcho» a formar parte del Museo Orgánico Romerillo, un proyecto que consiste en transformar un barrio marginal en un museo viviente.
Para Boa Mistura no hay otro como el poema como “No sé” del polifacético artista cubano Samuel Feijoo para expresar de una forma tan impactante las raíces de su pueblo.
Se trata de una intervención a escala de comunidad, en la que se conecta a personas a través de 25 puntos, uno por cada verso del poema.
Se compone de esta forma de partes que no se entienden de una forma independiente, sino de forma conjunta, que forman parte de un todo.
El colectivo de artistas siente un gran interés por la identidad de las comunidades, por ello han seleccionado una serie de soportes característicos del barrio del Romerillo.
Muros conformados por chapas de barriles, por trozos de maderas, collages de ladrillos y un sinfín de materiales que relatan cómo el pueblo cubano es capaz de inventar situaciones increíbles y maravillosas.
Para respetar parte del soporte y de la memoria, se ha trabajado simplemente con un recuadro de color que no llegue al límite de los muros.
Dentro de ese recuadro, el verso. Aislado, ajeno, resignificando el espacio.
Una intervención tan abstracta y poética que transforma el espacio público de todo el barrio.
Añadiendo una capa más de identidad.
«No sé» (Samuel Feijoo)
Mis raíces son profundas
porque viví
en el desierto
La arena
y el sol. Sed.
Fuego.
Abajo,
desesperada,
mi raíz
mordía
la roca,
mordía,
mordía…
Llegó al agua.
Mi raíz es
mi
vida-madre.
Y
no
sé
qué
es que
supo
horadar
la
roca.