Transarquitetõnica: la naturaleza salvaje invade la arquitectura.

El Museu de Arte Contemporânea da Universidade de São Paulo, que ocupa un edificio racionalista en el campus de la ciudad brasileña proyectado por Oscar Niemeyer, ha dejado crecer en su interior Transarquitetõnica, una obra de Henrique Oliveira en la que la naturaleza se muestra en su modo más salvaje.

La instalación puede visitarse hasta el 30 de noviembre de 2014.

La planta baja del edificio, caracterizada por la pureza de líneas que perfeccionó Niemeyer en todos sus trabajos, era un reto que el museo propuso a Oliveira, integrando a la perfección la obra del pintor y escultor en la arquitectura.

La primera impresión de Transarquitetõnica es que ha ignorado el espacio de Niemeyer, que reconoce su existencia pero pasa por ella a su modo particular. En cambio, al descubrir mejor la obra de Oliveira se comprueba que en realidad es un camino de exploración de la evolución de la arquitectura en la actualidad, desde el más profundo racionalismo al organicismo que propone la intervención.

La instalación muestra así que el arte de hoy en día puede ser cualquier cosa que pueda y quiera ser, incluso cuando se crea partiendo de una base, evolucionando de la manera que se desee. Transarquitetõnica es un mágico recorrido por las raíces más profundas del arte y la naturaleza, un laberinto que sorprende pero a la vez resulta familiar por los materiales escogidos.